Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Números 16:13 - Biblia Reina Valera 1995

13 ¿Es poco que nos hayas hecho venir de una tierra que destila leche y miel, para hacernos morir en el desierto, sino que también te quieres enseñorear de nosotros imperiosamente?

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

13 ¿Es poco que nos hayas hecho venir de una tierra que destila leche y miel, para hacernos morir en el desierto, sino que también te enseñorees de nosotros imperiosamente?

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

13 ¿No te basta que nos sacaste de Egipto, una tierra donde fluyen la leche y la miel, para matarnos aquí en este desierto, y que además ahora nos trates como a tus súbditos?

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

13 ¿Te parece poco habernos sacado de una tierra que manaba leche y miel para hacernos morir en este desierto? ¿Y tú quieres hacer de jefe?

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

13 ¿Es poco que nos hayas hecho subir de una tierra que fluye leche y miel para hacernos morir en el desierto, y que además pretendas dominar sobre nosotros de manera absoluta?

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

13 ¿Es poco habernos sacado de un país que manaba leche y miel para hacernos morir en el desierto, que todavía quieres erigirte sobre nosotros en jefe?

Gade chapit la Kopi




Números 16:13
19 Referans Kwoze  

Entonces pusieron sobre ellos comisarios de tributos para que los oprimieran con sus cargas. Así edificaron para el faraón las ciudades de almacenaje, Pitón y Ramesés.


Entonces el faraón dio a todo su pueblo esta orden: «Echad al río a todo hijo que nazca, y preservad la vida a toda hija.»


Los hijos de Israel les decían: —Ojalá hubiéramos muerto a manos de Jehová en la tierra de Egipto, cuando nos sentábamos ante las ollas de carne, cuando comíamos pan hasta saciarnos, pues nos habéis sacado a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud.


Así que el pueblo tuvo allí sed, y murmuró contra Moisés: —¿Por qué nos hiciste subir de Egipto para matarnos de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados?


Él respondió: —¿Quién te ha puesto a ti por príncipe y juez sobre nosotros? ¿Piensas matarme como mataste al egipcio? Entonces Moisés tuvo miedo, y pensó: «Ciertamente esto ha sido descubierto.»


Aconteció que después de muchos días murió el rey de Egipto. Los hijos de Israel, que gemían a causa de la servidumbre, clamaron; y subió a Dios el clamor de ellos desde lo profundo de su servidumbre.


¿No os basta con comer los buenos pastos, sino que también pisoteáis lo que de vuestros pastos queda, y cuando bebéis las aguas claras enturbiáis el resto con vuestros pies?


sino hasta un mes entero, hasta que os salga por las narices y la aborrezcáis, por cuanto menospreciasteis a Jehová que está en medio de vosotros, y llorasteis delante de él, diciendo: ‘¿Para qué salimos acá de Egipto?’”


La gente extranjera que se mezcló con ellos se dejó llevar por el hambre, y los hijos de Israel también volvieron a sus llantos, diciendo: «¡Quién nos diera a comer carne!


Nos acordamos del pescado que comíamos en Egipto de balde, de los pepinos, los melones, los puerros, las cebollas y los ajos.


También les contaron: «Nosotros llegamos a la tierra a la cual nos enviaste, la que ciertamente fluye leche y miel; estos son sus frutos.


Todos los hijos de Israel se quejaron contra Moisés y contra Aarón, y toda la multitud les dijo: «¡Ojalá hubiéramos muerto en la tierra de Egipto! ¡Ojalá muriéramos en este desierto!


¿Por qué nos trae Jehová a esta tierra para morir a espada, y para que nuestras mujeres y nuestros niños se conviertan en botín de guerra? ¿No nos sería mejor regresar a Egipto?»


Luego Moisés mandó llamar a Datán y Abiram, hijos de Eliab. Pero ellos respondieron: —No iremos allá.


Pero sus conciudadanos lo odiaban y enviaron tras él una embajada, diciendo: “No queremos que este reine sobre nosotros.”


»A este Moisés, a quien habían rechazado diciendo: “¿Quién te ha puesto por gobernante y juez?”, a este envió Dios como gobernante y libertador por mano del ángel que se le apareció en la zarza.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite