Levítico 13:23 - Biblia Reina Valera 1995

²³ Pero si la mancha blanca permanece en su lugar y no se ha extendido, es la cicatriz de la llaga, y el sacerdote lo declarará limpio.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²³ Pero si la mancha blanca se estuviere en su lugar, y no se hubiere extendido, es la cicatriz del divieso, y el sacerdote lo declarará limpio.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²³ pero si la zona afectada no crece ni se extiende, es simplemente la cicatriz de la llaga, y el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²³ Si, en cambio, la mancha no se ha extendido, es la cicatriz de la úlcera; el sacerdote declarará la persona pura.

La Biblia Textual 3a Edicion

²³ Pero si la mancha lustrosa se mantiene fija y no se esparce, es cicatriz de la úlcera, y el sacerdote lo declarará limpio.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²³ Pero si la mancha se mantiene igual y no se extiende, es la cicatriz de la úlcera, y el sacerdote le declarará puro.

Levítico 13:23 Referans Kwoze

Génesis 38:26

Cuando Judá los reconoció, dijo: «Más justa es ella que yo, por cuanto no la he dado a mi hijo Sela.» Y nunca más la conoció.

2 Samuel 12:13

Entonces dijo David a Natán: —Pequé contra Jehová. Natán dijo a David: —También Jehová ha perdonado tu pecado; no morirás.

Proverbios 28:13

El que oculta sus pecados no prosperará, pero el que los confiesa y se aparta de ellos alcanzará misericordia.

Levítico 13:22

Si se ha extendido por la piel, entonces el sacerdote lo declarará impuro: es una llaga.

Levítico 13:24

»Asimismo cuando haya en la piel del cuerpo una quemadura de fuego, y aparezca en la parte quemada una mancha blanquecina, rojiza o blanca,

Levítico 13:26

Pero si el sacerdote la examina y no hay en la mancha vello blanco, ni es más profunda que la piel, sino que es oscura, lo encerrará el sacerdote por siete días.

Mateo 26:75

Entonces Pedro se acordó de las palabras que Jesús le había dicho: «Antes que cante el gallo, me negarás tres veces.» Y saliendo fuera, lloró amargamente. «Palabras» Referencias Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso. ¡Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu! Mujer, he ahí tu hijo. [Después dijo al discípulo:] He ahí tu madre. Tengo sed. Consumado es.

2 Corintios 2:7

Así que, al contrario, vosotros más bien debéis perdonarlo y consolarlo, para que no sea consumido por demasiada tristeza.

Gálatas 6:1

Hermanos, si alguno es sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradlo con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.