Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Juan 14:2 - Biblia Reina Valera 1995

2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 En el hogar de mi Padre, hay lugar más que suficiente. Si no fuera así, ¿acaso les habría dicho que voy a prepararles un lugar?

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 En la casa de mi Padre hay muchas habitaciones. De no ser así, no les habría dicho que voy a prepararles un lugar.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si no, os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 En la casa de mi Padre hay muchas moradas; si no, ya os lo habría dicho; porque voy a preparar un lugar para vosotros.

Gade chapit la Kopi




Juan 14:2
25 Referans Kwoze  

Dijo el siervo: “Señor, se ha hecho como mandaste y aún hay lugar.”


Hijitos, aún estaré con vosotros un poco. Me buscaréis, pero, como dije a los judíos, así os digo ahora a vosotros: A donde yo voy, vosotros no podéis ir.


Le dijo Simón Pedro: —Señor, ¿a dónde vas? Jesús le respondió: —A donde voy, no me puedes seguir ahora, pero me seguirás después.


Habéis oído que yo os he dicho: “Voy, y vuelvo a vosotros.” Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al Padre, porque el Padre mayor es que yo.


Pero os he dicho estas cosas para que, cuando llegue la hora, os acordéis de que ya os lo había dicho. »Esto no os lo dije al principio, porque yo estaba con vosotros.


»Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo esté, también ellos estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado, pues me has amado desde antes de la fundación del mundo.


porque yo le mostraré cuánto le es necesario padecer por mi nombre.


Sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshace, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna, en los cielos.


Dios no nos ha puesto para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo,


en la esperanza de la vida eterna. Dios, que no miente, prometió esta vida desde antes del principio de los siglos,


porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios.


porque no tenemos aquí ciudad permanente, sino que buscamos la por venir.


donde Jesús entró por nosotros como precursor, hecho Sumo sacerdote para siempre según el orden de Melquisedec.


El Espíritu Santo da a entender con esto que aún no se había abierto el camino al Lugar santísimo, entre tanto que la primera parte del Tabernáculo estuviera en pie.


y de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos ama, nos ha lavado de nuestros pecados con su sangre


Y yo, Juan, vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de parte de Dios, ataviada como una esposa hermoseada para su esposo.


Al vencedor yo lo haré columna en el templo de mi Dios y nunca más saldrá de allí. Escribiré sobre él el nombre de mi Dios y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, con mi Dios, y mi nombre nuevo.


Al vencedor le concederé que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido y me he sentado con mi Padre en su trono.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite