Génesis 8:3 - Biblia Reina Valera 19953 Las aguas decrecían gradualmente sobre la tierra; y se retiraron las aguas al cabo de ciento cincuenta días. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 19603 Y las aguas decrecían gradualmente de sobre la tierra; y se retiraron las aguas al cabo de ciento cincuenta días. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente3 Entonces las aguas del diluvio se retiraron de la tierra en forma gradual. Después de ciento cincuenta días, Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)3 Las aguas iban bajando sobre la tierra, con flujo y reflujo; empezaron a descender después de los ciento cincuenta días. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion3 Entonces las aguas fueron retrocediendo de sobre la tierra, yendo y viniendo, y al cabo de ciento cincuenta días las aguas disminuyeron. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 19753 Fueron retrocediendo poco a poco las aguas de sobre la tierra y al cabo de ciento cincuenta días habían disminuido las aguas Gade chapit la |
Y permanecieron las aguas ciento cincuenta días sobre la tierra. Parte del relato Relato bíblico () Relato extrabíblico Epopeya de Gilgamés (babilónico; s. VIII a.C.) Motivo Jehová decide destruir a la humanidad por medio del diluvio, porque todos se habían pervertido (). Los dioses no soportaban el ruido producido por los seres humanos; deciden acabarlos por medio del diluvio. Aviso Jehová avisa a Noé, el único que hacía la voluntad divina, de su decisión. Le ordena construir un arca para que se salven Noé, su familia y los animales (unos pocos de cada especie) (,). Ea, el dios de las aguas dulces (y uno de los creadores de la humanidad), avisa a Utnapistim de la decisión de los dioses. Le ordena crear una barca para que se salven él y la simiente de toda vida. Le indica qué decir si le preguntan qué es lo que estaba haciendo. Construcción del arca y entrada en ella Noé obedeció a Jehová; construyó el arca con las medidas que Dios le dio. Entraron Noé, su esposa, sus hijos y sus nueras, y los animales (). Utnapistim obedeció a Ea; construyó la barca con las medidas que se le dieron. Entraron él, su familia y los artesanos que le ayudaron en la construcción de la barca, y los animales. Utnapistim llevó consigo sus riquezas. El diluvio Jehová cerró la puerta del arca. Se inició el diluvio, que duró cuarenta días. Dios hace que cesen las lluvias. Las aguas cubrieron la tierra por casi un año. El arca reposó en el monte Ararat (). Utnapistim cerró la puerta de la barca. El diluvio duró siete días; fue tan terrible que los mismos dioses se espantaron y huyeron al más alto de los cielos. Las aguas cubrieron la tierra por poco más de un mes. La barca reposó en el monte Nisir. Salida del arca Noé y su familia, y los animales salen del arca a la orden de Jehová (). Utnapistim ve el estado de la tierra. Abre las puertas de la barca y todos salen menos él, pues ha visto los cadáveres esparcidos por toda la tierra, convertidos en barro. Se siente desamparado. Al tiempo sale. El sacrificio y sus efectos Noé levantó un altar y ofreció sacrificios a Jehová. Al Señor le agradaron los sacrificios y prometió no volver a maldecir la tierra por causa de la humanidad, ni volver a destruir a todos los animales (). Utnapistim ofreció un sacrificio de acción de gracias a las divinidades, las cuales acudieron rápidamente y se juntaron como moscas alrededor del sacrificio. La diosa Istar invitó a todos los dioses a que participaran del sacrificio, menos a Enlil (el dios que causó la devastación, inesperada para los otros dioses). Enlil se enojó porque escaparon algunos seres humanos. Luego de dialogar con otros dioses, Enlil se tranquilizó. La bendición de Dios Jehová bendice a Noé y su familia. Les dice que llenen la tierra y les da poder sobre los animales. Podrán comer todos los animales y verduras que quieran. No pueden comer carne con sangre. Dios pedirá cuentas por la vida de cada ser humano (). Enlil bendice a Utnapistim y permite que deje de ser mortal y se convierta en uno semejante a los dioses. La alianza de Dios con el ser humano Jehová hace un pacto con Noé y con sus descendientes (o sea, con toda la humanidad): no volver a destruir al ser humano ni a los animales por medio de un diluvio ().