Entonces Aarón le dijo a Moisés: «Mira, mis hijos trajeron hoy su sacrificio para purificar del pecado y su sacrificio que debe quemarse completamente ante el SEÑOR, ¡Y miren la desgracia que me sucedió! Si yo hubiera comido del sacrificio para purificar del pecado hoy, ¿el SEÑOR lo habría aprobado?»