Jeremías 9:15 - Biblia Palabra de Dios para Todos

¹⁵ Por eso dice el SEÑOR Todopoderoso, el Dios de Israel: «Voy a darle de comer comida amarga a este pueblo y de beber, agua envenenada.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁵ Por tanto, así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí que a este pueblo yo les daré a comer ajenjo, y les daré a beber aguas de hiel.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁵ Así que ahora esto dice el Señor de los Ejércitos Celestiales, Dios de Israel: ¡mira!, los alimentaré con amargura y les daré veneno para beber.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁵ Los desparramaré entre las naciones que no conocieron ni ellos ni sus padres, y detrás de ellos enviaré la espada hasta acabar con todos.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁵ Por tanto, así dice YHVH Sebaot, Dios de Israel: He aquí, Yo daré a comer a este pueblo ajenjo, y les daré a beber aguas venenosas.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁵ Los dispersaré por las naciones que ni ellos ni sus padres conocieron, y enviaré detrás de ellos a la espada hasta acabar con ellos'. Así, dice Yahveh Sebaot:

Jeremías 9:15 Referans Kwoze

Salmos 60:3

Tú has hecho sufrir mucho a tu pueblo, nos ha hecho beber un vino que aturde.

Salmos 69:21

Me dieron veneno en lugar de comida, vinagre cuando tuve sed.

Salmos 75:8

El SEÑOR tiene en su mano una copa llena de vino espumoso mezclado con especias. Cuando lo derrame, todos los perversos de la tierra beberán hasta la última gota.

Salmos 80:5

Nos has dado lágrimas por comida; lágrimas en abundancia por bebida.

Isaías 2:17

La arrogancia del hombre y el orgullo humano serán humillados. Ese día solo el SEÑOR será exaltado,

Isaías 2:22

Dejen de confiar en los seres humanos; su vida es muy corta y no valen nada.

Jeremías 23:15

Por eso, esto dice el SEÑOR Todopoderoso contra los profetas: «Haré que coman comida amarga y que beban agua envenenada, porque la corrupción se ha originado en los profetas de Jerusalén y se ha esparcido por todo el país».

Jeremías 24:10

Les enviaré guerra, hambre y enfermedad hasta que sean borrados de la tierra que les di a ellos y a sus antepasados».

Jeremías 25:15

Esto me dijo el SEÑOR, Dios de Israel: «Toma de mi mano esta copa llena del vino de mi furia y haz que beban de ella todas las naciones a las que yo te envíe.

Jeremías 44:27

Porque yo estaré atento para enviarles sufrimiento, no prosperidad. Todo el pueblo de Judá que vive en Egipto morirá en batalla o de hambre, hasta que no quede ninguno.

Jeremías 49:37

Despedazaré a Elam en presencia de sus enemigos, ante los que quieren matarlos. Los haré sufrir para mostrarles mi enojo y los acosaré militarmente hasta que acabe con ellos. Es la decisión del SEÑOR.

Jeremías 8:14

»¿Qué estamos haciendo aquí sentados? Reúnanse y vámonos a las ciudades fortificadas. Si el SEÑOR nuestro Dios nos va a destruir, entonces que nos maten allá. Hemos pecado en contra del SEÑOR, y por eso él nos ha dado a beber agua envenenada.

Lamentaciones 3:15

Me llenó de amargura; me dio a beber la bebida más amarga.

Lamentaciones 3:19

Recuerda que estoy triste y no tengo hogar. Recuerda la bebida amarga y el veneno que me diste.

Ezequiel 5:12

Una tercera parte de ustedes morirá de enfermedad y hambre; otra tercera parte caerá bajo mi espada en los campos que rodean la ciudad; y la otra parte la esparciré al viento. Así con mi espada amenazaré de muerte a mi pueblo.

Ezequiel 5:2

Cuando el sitio termine, quema una tercera parte del cabello en la ciudad, corta otra tercera parte en las afueras de la ciudad y esparce la última parte al viento. Yo los atacaré con mi espada.

Deuteronomio 28:36

»El SEÑOR obligará a ti y a tu rey a ir a una nación que tú ni tus antepasados conocen. Allí servirás a otros dioses hechos de madera y piedra.

Deuteronomio 29:18

Asegúrense que no haya ningún hombre, mujer o grupo entre ustedes cuyo corazón se esté alejando hoy del SEÑOR nuestro Dios para ir a servir a los dioses de esas naciones. Asegúrense que no haya entre ustedes alguien que sea como una raíz que crece como una planta amarga y venenosa.

Apocalipsis 8:11

La estrella se llamaba Ajenjo y volvió amarga la tercera parte del agua de los ríos. Mucha gente murió por haber bebido de esa agua.