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Génesis 26:28 - Biblia Palabra de Dios para Todos

28 Ellos respondieron: —Ahora estamos convencidos de que el SEÑOR está contigo. Por esa razón hemos pensado que debemos hacer un pacto entre tú y nosotros.

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Biblia Reina Valera 1960

28 Y ellos respondieron: Hemos visto que Jehová está contigo; y dijimos: Haya ahora juramento entre nosotros, entre tú y nosotros, y haremos pacto contigo,

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Biblia Nueva Traducción Viviente

28 —Podemos ver claramente que el Señor está contigo —respondieron ellos—. Por eso queremos hacer un tratado contigo bajo juramento.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

28 Le contestaron: 'Hemos visto claramente que Yavé está contigo, y hemos dicho: Prometamos con juramento, nosotros y tú, que viviremos en paz.

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La Biblia Textual 3a Edicion

28 Le respondieron: Ciertamente hemos visto que YHVH está contigo, y hemos pensado interponer un juramento solemne entre nosotros, entre tú y nosotros, y concertaremos un pacto contigo

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

28 Respondieron ellos: 'Hemos visto claramente que Yahveh está contigo y hemos acordado que haya un juramento entre nosotros y tú, y que concluyamos contigo una alianza.

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Génesis 26:28
21 Referans Kwoze  

Quiero que me prometas ante el SEÑOR, Dios del cielo y de la tierra, que no vas a elegir una esposa para mi hijo de entre las hijas de Canaán, entre quienes vivimos.


Pero si vas hasta la tierra de mis familiares y ellos se niegan a darte una esposa para mi hijo, entonces quedarás libre de tu promesa”.


Ven, hagamos un pacto entre tú y yo, y que haya un testigo entre los dos.


quien se dio cuenta de que el SEÑOR estaba con José y que el SEÑOR hacía que le fuera muy bien en todo.


El SEÑOR bendijo la casa de ese egipcio desde el momento en que él puso a cargo de José todas sus posesiones. El SEÑOR bendijo a Potifar en todo lo que tenía, tanto en la casa como en el campo.


Salomón hijo de David consolidó su reino, pues el SEÑOR su Dios estaba con él e hizo que su poder aumentara enormemente.


Después Asá convocó a toda la tribu de Judá, a la de Benjamín y también a muchos de Efraín y de Manasés y de la tribu de Simeón que de Israel se habían aliado con Judá cuando vieron que el SEÑOR su Dios estaba con ellos.


Esto dice el SEÑOR: «La riqueza de Egipto y las ganancias de Cus y de los sabeos, pueblo de elevada estatura, serán tuyas, y ellos te servirán como esclavos. Se inclinarán ante ti y te dirán: “Ciertamente Dios está con ustedes, es el único Dios que existe. No hay otro Dios”».


Los descendientes de los que te oprimieron vendrán a inclinarse ante ti y todos los que te despreciaron se tenderán a tus pies. Ellos te llamarán “La ciudad del SEÑOR, Sion la del Santo de Israel”.


A ustedes se les llamará sacerdotes del SEÑOR y siervos de nuestro Dios. Ustedes disfrutarán la riqueza de las naciones y estarán orgullosos de las riquezas de ellos.


Sus descendientes serán reconocidos en las naciones y sus hijos entre los pueblos. Todos los que los vean reconocerán que son un pueblo bendecido por el SEÑOR».


¿Qué podemos decir de todo esto? Si Dios está a nuestro favor, nadie podrá estar contra nosotros.


Los secretos de su corazón quedarán al descubierto y se postrará rostro en tierra para alabar a Dios, diciendo: «¡En verdad Dios está entre ustedes!»


No amen el dinero, sino conténtense con lo que tienen. Porque Dios dijo: «Nunca te abandonaré ni te dejaré solo».


Los seres humanos usan el nombre de alguien más grande que ellos para darle seriedad a una promesa. Al hacerlo así, afirman que lo dicho es verdad y eso termina toda discusión entre ellos.


Entonces el SEÑOR le dijo a Josué: «Hoy empezaré a darte más importancia ante todos los israelitas, así sabrán que estaré contigo como lo estuve con Moisés.


Alrededor de un mes después, Najás el amonita y su ejército rodearon a Jabés de Galaad. Todos los hombres de ahí le dijeron a Najás: —Si haces un pacto con nosotros, te serviremos.


Entonces Saúl se dio cuenta de que el SEÑOR estaba con David y de que su hija Mical amaba a David.


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