23 »Cuando mi ángel vaya delante de ti, te llevará a la tierra de los amorreos, heteos, ferezeos, cananeos, heveos y jebuseos, y los destruirá a ellos.
23 Porque mi Ángel irá delante de ti, y te llevará a la tierra del amorreo, del heteo, del ferezeo, del cananeo, del heveo y del jebuseo, a los cuales yo haré destruir.
23 Pues mi ángel irá delante de ti y te llevará a la tierra de los amorreos, de los hititas, de los ferezeos, de los cananeos, de los heveos y de los jebuseos, para que vivas en ella. Yo los destruiré por completo.
23 Mi Angel irá delante de ti y te introducirá en el país del amorreo, del heteo, del fereceo, del cananeo, del jeveo y del jebuseo, a los cuales yo exterminaré.
23 Mi ángel caminará delante de ti y te conducirá a la tierra de los amorreos, de los hititas, de los perizeos, de los cananeos, de los jiveos y de los jebuseos, a quienes yo exterminaré.
El SEÑOR, Dios del cielo, me sacó de la casa de mi papá y de mi tierra natal y me trajo aquí. Allá era el hogar de mi papá y de mi familia, pero Dios me prometió que esta nueva tierra le iba a pertenecer a mi familia. Él te va a mandar un ángel para que tú puedas elegir allá una esposa para mi hijo.
Moisés le contó a su suegro todo lo que el SEÑOR les había hecho al faraón y a los egipcios con el fin de ayudar a Israel. También le contó sobre todas las dificultades que habían tenido en el camino y cómo el SEÑOR los había salvado.
Decidí sacarlos de sus sufrimientos en Egipto y llevarlos a la tierra de los cananeos, los heteos, los amorreos, los ferezeos, los heveos y los jebuseos a una tierra que rebosa de leche y de miel”.
Por tanto, mi pueblo será hecho prisionero y desterrado porque no reconoció mi autoridad. La gente importante padecerá de hambre, y los del montón padecerán de sed.
Reconoce entonces que el SEÑOR tu Dios es quien está cruzando el río Jordán delante de ti como un fuego que todo lo consume, y que los destruirá y los vencerá mientras avanzas. Tú los expulsarás y destruirás rápidamente, tal como el SEÑOR te prometió.
En una ocasión, Josué se acercó a Jericó y vio a un hombre frente a él, con una espada en la mano. Josué se le acercó y le dijo: —¿Eres de los nuestros o eres enemigo?
Todos los reyes del lado occidental del Jordán, en la montaña, en el valle y a lo largo de la costa del mar Mediterráneo, se enteraron de lo sucedido. Eran los reyes hititas, amorreos, cananeos, ferezeos, heveos y jebuseos.