Daniel 6:25 - Biblia Palabra de Dios para Todos25 El rey Darío escribió este mensaje para la gente de todas las naciones y lenguas del mundo: «Los saludo a todos y deseo que tengan paz y prosperidad. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 196025 Entonces el rey Darío escribió a todos los pueblos, naciones y lenguas que habitan en toda la tierra: Paz os sea multiplicada. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente25 Después el rey Darío envió el siguiente mensaje a la gente de toda raza, nación y lengua en el mundo entero: «¡Paz y prosperidad a todos ustedes! Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)25 El rey Darío escribió a todos los pueblos, naciones y lenguas que viven en toda la tierra: '¡La abundancia y la paz sean con ustedes!' Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion25 Y el rey Darío proclamó a todos los pueblos, naciones y lenguas de la tierra: Paz os sea multiplicada. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 197525 El rey mandó que trajeran a aquellos hombres que habían denunciado a Daniel y que los arrojaran al foso de los leones, a ellos, a sus hijos y a sus mujeres. Aún no habían llegado al fondo del foso, cuando ya se habían lanzado sobre ellos los leones y los habían despedazado. Gade chapit la |
Rápidamente fueron llamados los secretarios del rey el día 23 del tercer mes, el mes de siván. Esos secretarios escribieron todas las órdenes de Mardoqueo a los judíos, a los virreyes, a los gobernadores, y a los jefes de las 127 provincias desde la India hasta Etiopía. Esas órdenes fueron redactadas en la escritura de cada provincia y fueron traducidas al idioma de cada pueblo. Fueron comunicadas a los judíos en su propio idioma y en su propio alfabeto.
El día 13 del primer mes se reunieron todos los secretarios del rey. Ellos escribieron en un decreto todas las órdenes de Amán y lo enviaron a cada pueblo en su propia escritura y en su propio idioma. El decreto se envió a todos los virreyes, a los gobernadores de las diferentes provincias y a los jefes de todos los pueblos. El decreto se escribió con la autorización del rey Jerjes y la orden se entregó firmada y sellada por el propio rey.