2 Samuel 21:1 - Biblia Palabra de Dios para Todos

¹ Durante el reinado de David, hubo escasez de alimentos por tres años. David oró al SEÑOR, y el SEÑOR le contestó: «Saúl y su familia asesina son la causa de esta escasez de alimentos por haber matado a los gabaonitas».

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹ Hubo hambre en los días de David por tres años consecutivos. Y David consultó a Jehová, y Jehová le dijo: Es por causa de Saúl, y por aquella casa de sangre, por cuanto mató a los gabaonitas.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹ Durante el reinado de David hubo un hambre que duró tres años. Entonces David consultó al Señor, y el Señor dijo: «El hambre se debe a que Saúl y su familia son culpables de la muerte de los gabaonitas».

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹ Hubo bajo el reinado de David una hambruna que duró tres años. David consultó a Yavé y éste le respondió: 'Saúl y su familia tienen pendiente una deuda de sangre porque Saúl dio muerte a los gabaonitas'.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹ En los días de David hubo hambre por tres años consecutivos, y buscó David el rostro de YHVH; y dijo YHVH: Es a causa de Saúl, a causa de esa casa sanguinaria que dio muerte a los gabaonitas.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹ Hubo en tiempos del rey David un hambre que duró tres años consecutivos. Consultó entonces David a Yahveh y Yahveh le respondió: 'Hay sangre sobre Saúl y sobre su familia, por haber dado él muerte a los gabaonitas'.

2 Samuel 21:1 Referans Kwoze

Génesis 12:10

Hubo un tiempo de sequía y escasez de comida en la tierra, así que Abram se fue a vivir un tiempo a Egipto porque la hambruna era muy fuerte.

Génesis 26:1

Una vez hubo una hambruna en esa región, como en tiempos de la hambruna que hubo cuando vivía Abraham. Por esta razón Isaac se fue a Guerar, donde vivía Abimélec, rey de los filisteos.

Génesis 41:57

Gente de todo el mundo fue a Egipto a comprarle trigo a José, ya que era muy grande la escasez en todo el mundo.

Génesis 42:5

Así los hijos de Israel se fueron a comprar trigo, en compañía de muchos otros, porque la escasez había alcanzado la tierra de Canaán.

Génesis 43:1

La hambruna era muy grave en la tierra.

2 Samuel 16:8

El SEÑOR te ha castigado por todos los que mataste de la familia de Saúl. Destronaste a Saúl y ahora a ti te pasa lo mismo. El SEÑOR le ha dado el reino a tu hijo Absalón porque tú eres un asesino.

2 Samuel 20:26

e Ira el yairita era el sacerdote personal de David.

2 Samuel 21:5

Los gabaonitas respondieron: —Saúl hizo planes contra nosotros. Trató de destruir a nuestra gente que vivía en la tierra de Israel.

2 Samuel 24:1

Una vez más el SEÑOR se enojó con Israel e hizo que David se volviera contra los israelitas ordenándole: «Levanta un censo de Israel y de Judá».

2 Samuel 5:19

Entonces David le preguntó al SEÑOR: —¿Debo pelear contra los filisteos? ¿Cuento contigo para derrotarlos? El SEÑOR le dijo: —Sí, cuenta conmigo.

2 Samuel 5:23

David consultó al SEÑOR, y él le respondió así: —No subas allá. Rodéalos y atácalos por la retaguardia, desde el otro lado de los árboles de bálsamo.

1 Reyes 17:1

Elías era un profeta de la aldea de Tisbé, que está en Galaad. Fue y le dijo al rey Acab: «Vengo de la presencia del SEÑOR viviente, el Dios de Israel. Por su poder, te aseguro que ni lluvia ni rocío caerán en los próximos años, hasta que yo dé la orden».

1 Reyes 18:2

Así que Elías fue a ver a Acab. El hambre que se sufría en Samaria era muy grave.

2 Reyes 6:25

Los soldados no permitían que nadie entrara a la ciudad con alimentos, por eso hubo una gran escasez de alimentos en la ciudad. Fue tanta el hambre que la cabeza de un burro se vendía por 80 monedas de plata y un cuarto de litro de estiércol por cinco monedas de plata.

2 Reyes 8:1

Eliseo habló con la mujer a cuyo hijo él había revivido. Le dijo: —Tú y tu familia deben mudarse a otro país, porque el SEÑOR ha decidido que va a haber una hambruna aquí. Durará unos siete años.

Job 10:2

Le diré a Dios: “No me condenes; dime, ¿de qué me acusas?

Salmos 27:8

SEÑOR, de todo corazón quiero conversar contigo y aquí estoy para adorarte.

Salmos 50:15

Llámame cuando estés angustiado, que yo te rescataré y tú me honrarás».

Salmos 91:15

Me llamará y yo le responderé; estaré con él cuando se encuentre en dificultades; lo rescataré y haré que le rindan honores.

Levítico 26:26

Cuando yo les corte el suministro de comida, habrá tan poca sémola que bastará con un solo horno para que diez mujeres horneen el pan. Ellas racionarán tanto el pan, que ustedes comerán su ración pero quedarán con hambre.

Números 27:21

pero para consultarme, él debe presentarse ante el sacerdote Eleazar, quien usará el urim para consultar al SEÑOR. Cuando Dios lo ordene, Josué y todos los israelitas con él, irán a la guerra; y volverán también cuando él lo ordene.

Josué 7:1

Pero los israelitas no obedecieron la orden con respecto a lo que tenía que quedar solo para el SEÑOR o ser destruido como ofrenda. Un hombre de la tribu de Judá llamado Acán, hijo de Carmí, nieto de Zabdí y bisnieto de Zara, tomó algunas cosas de lo que estaba consagrado a la destrucción. Eso hizo que el SEÑOR se pusiera furioso con los israelitas.

Josué 9:20

Esto es lo que les haremos: Los dejaremos vivir, para que el castigo de Dios no caiga sobre nosotros debido al juramento que les hicimos.

Rut 1:1

Cuando los jefes gobernaban en Israel, hubo una época de hambre en Judá. Había un hombre llamado Elimélec, efrateo que vivía en Belén, el cual tuvo que emigrar al país de Moab con su mujer y sus dos hijos. Su esposa se llamaba Noemí y sus dos hijos se llamaban Majlón y Quilión. Por causa del hambre, ellos se fueron a vivir al país de Moab y allí permanecieron.

1 Samuel 10:22

Entonces le preguntaron al SEÑOR si Saúl no había llegado todavía. El SEÑOR respondió: «Saúl está escondido entre el equipaje».

1 Samuel 23:11

¿Me entregará la gente de Queilá a Saúl? ¿Vendrá realmente? Dime, SEÑOR Dios de Israel, yo soy tu siervo. El SEÑOR le respondió: —Saúl vendrá.

1 Samuel 23:2

David consultó al SEÑOR: —¿Debo ir a pelear contra los filisteos? El SEÑOR le respondió: —Sí, ve y pelea contra ellos y libera a Queilá.

1 Samuel 23:4

David consultó de nuevo al SEÑOR, y el SEÑOR le respondió: —Ve a Queilá que yo te ayudaré a derrotar a los filisteos.