Efesios 1:3 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento)

³ Alabemos a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que por medio de Cristo nos ha bendecido con toda suerte de bienes espirituales y celestiales.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³ Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo,

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ Toda la alabanza sea para Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien nos ha bendecido con toda clase de bendiciones espirituales en los lugares celestiales, porque estamos unidos a Cristo.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ ¡Bendito sea Dios, Padre de Cristo Jesús nuestro Señor, que nos ha bendecido en el cielo, en Cristo, con toda clase de bendiciones espirituales!

La Biblia Textual 3a Edicion

³ Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesús, el Mesías, quien nos bendijo en los cielos° con toda bendición espiritual en el Mesías,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ Bendito Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido con toda bendición espiritual en el cielo, en Cristo,

Efesios 1:3 Referans Kwoze

Lucas 2:28

Y tomando al niño en brazo alabó, a Dios diciendo:

Juan 14:20

Los que son del mundo dejarán de verme dentro de poco; pero vosotros seguiréis viéndome, porque la vida que yo tengo la tendréis también vosotros.

Juan 17:21

Te pido que todos vivan unidos. Padre, como tú estás en mí y yo en ti, que también ellos estén unidos a nosotros. De este modo, el mundo podrá creer que tú me has enviado.

Juan 20:17

Jesús le dijo: - No me retengas, porque todavía no he ido a mi Padre; anda, ve y diles a mis hermanos que voy a mi Padre, que es también vuestro Padre; a mi Dios, que es también vuestro Dios.

Romanos 12:5

De manera semejante, nosotros, siendo muchos, estamos injertados en Cristo para formar un solo cuerpo, y cada uno es un miembro al servicio de los demás.

Romanos 15:6

Alabaréis así todos juntos y a una sola voz a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo.

1 Corintios 1:30

A vosotros Dios os ha injertado en Cristo Jesús, que se ha convertido a su vez, para nosotros, en sabiduría, en fuerza salvadora, santificadora y liberadora.

1 Corintios 12:12

Sabido es que el cuerpo, siendo uno, tiene muchos miembros, y que los diversos miembros constituyen un solo cuerpo. Lo mismo sucede con Cristo.

2 Corintios 1:3

Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y fuente de todo consuelo.

2 Corintios 11:31

El Dios y Padre de Jesús el Señor - ¡bendito sea para siempre! - sabe que no miento.

2 Corintios 5:17

El cristiano es un hombre nuevo; lo viejo ha pasado, y una nueva realidad está presente.

2 Corintios 5:21

Cristo fue del todo inocente; más, por nosotros, Dios le trató como al propio pecado, para que por medio de él experimentemos nosotros la fuerza salvadora de Dios.

Gálatas 3:9

Así que todos los que creen serán bendecidos junto con el creyente Abraham.

Efesios 1:10

llevando la historia a su punto culminante: a saber, reconstruir en Cristo la unidad de todas las cosas, las del cielo y las de la tierra.

Efesios 1:17

Que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre, a quien toda gloria pertenece, os otorgue un espíritu de sabiduría y una revelación interior que os haga conocerle profundamente.

Efesios 1:20

Es el poder que Dios desplegó en Cristo al resucitarle y sentarle a su lado en el cielo, en el lugar de honor,

Efesios 2:6

nos resucitó y nos sentó con Cristo Jesús en el cielo.

Efesios 3:10

Así, por medio de la Iglesia, los principados y potestades de los cielos tienen ahora conocimiento de la fecunda sabiduría de Dios

Efesios 6:12

Porque no estamos luchando contra hombres de carne y hueso, sino contra las potencias invisibles que dominan en este mundo de tinieblas, contra las fuerzas espirituales del mal habitantes de un mundo supraterreno.

Filipenses 2:11

y todos proclamen que Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.

Hebreos 8:5

Sacerdotes, sin embargo, cuyo culto no pasa de ser sombra y figura de las realidades celestiales. Así se lo dio a entender Dios a Moisés cuando éste se disponía a construir el santuario: Mira - le dijo -: hazlo todo según el modelo que te ha sido mostrado en el monte.

Hebreos 9:23

Se necesitaban, pues, tales sacrificios para purificar lo que no era sino esbozo de las realidades celestiales; pero las mismas realidades celestiales precisaban de sacrificios más valiosos.

1 Pedro 1:3

Bendito sea Dios, padre de nuestro Señor Jesucristo, que, por su inmenso amor y mediante la resurrección de Jesucristo, nos ha hecho renacer a una vida de esperanza,