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Apocalipsis 3:12 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento)

12 Al vencedor le pondré de columna en el templo de mi Dios, para que ya nunca salga de allí. Y sobre la columna grabaré el nombre de mi Dios, y grabaré también, junto a mi nombre nuevo, el nombre de la ciudad de mi Dios , la Jerusalén nueva, que desciende del trono celeste de mi Dios.

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Biblia Reina Valera 1960

12 Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

12 A todos los que salgan vencedores, los haré columnas en el templo de mi Dios, y nunca tendrán que salir de allí. Yo escribiré sobre ellos el nombre de mi Dios, y ellos serán ciudadanos de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén que desciende del cielo y de mi Dios. Y también escribiré en ellos mi nuevo nombre.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

12 Al vencedor lo pondré como columna en el Templo de mi Dios, de donde nadie lo sacará. Grabaré en él el nombre de mi Dios, el nombre de la ciudad que baja del cielo, la nueva Jerusalén que viene de Dios, y mi nombre nuevo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

12 Al° que venza, lo haré columna en el santuario de mi Dios, y nunca más saldrá fuera, y escribiré sobre él el nombre de mi Dios y el nombre de la ciudad de mi Dios: la nueva Jerusalem, la cual desciende° del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 Al que venza, lo haré columna en el santuario de mi Dios, y no saldrá ya fuera jamás; grabaré en él el nombre de mi Dios, el nombre de la ciudad de mi Dios, de la nueva Jerusalén, la que baja del cielo, de junto a mi Dios, y mi nombre nuevo'.

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Apocalipsis 3:12
26 Referans Kwoze  

Ellos se la mostraron, y Jesús les preguntó: - ¿De quién es esta efigie y esta inscripción? Le contestaron: - Del emperador.


Así que Santiago, Pedro y Juan, considerados como columna de la Iglesia, reconocieron que Dios le había concedido el privilegio de esta misión, y nos tendieron la mano a Bernabé y a mí en señal de acuerdo: ellos llevarían el mensaje de salvación a los judíos, y nosotros a las demás naciones.


origen de toda vida tanto en el cielo como en la tierra,


Vosotros, en cambio, os habéis acercado a la montaña de Sión, a la ciudad del Dios viviente, a la Jerusalén celestial. Allí está la multitud de los ángeles en fiesta;


porque no somos ciudadanos que hayan de permanecer para siempre en la ciudad de este mundo; nosotros caminamos en busca de la ciudad del futuro.


En cuanto a vosotros, hijos míos, pertenecéis a Dios y habéis vencido a esos pretendidos profetas, pues el que está con vosotros es más fuerte que el que está con el mundo.


Volví a mirar, y vi al Cordero de pie sobre el monte de Sión. Le acompañaban los ciento cuarenta y cuatro mil que llevaban grabado en la frente el nombre del Cordero y el nombre de su Padre.


Ellos harán la guerra al Cordero; pero el Cordero, Rey de reyes y Señor de señores, los derrotará, y en su triunfo participarán los llamados, los elegidos y los creyentes que le acompañan.


No te acobardes ante los sufrimientos que te esperan. Es verdad que el diablo va a poner a prueba a algunos de vosotros metiéndolos en la cárcel; pero vuestra angustia durará poco tiempo. Tú permanece fiel hasta la muerte , y yo te daré la corona de vida.


Cambia, pues, de conducta, porque, si no, iré pronto a ti y entraré en combate contra ésos con la espada que sale de mi boca.


Aunque tienes a tu favor que aborreces la conducta de los nicolaítas, como la aborrezco yo también.


Vi también bajar del cielo la ciudad santa, la nueva Jerusalén. Venía de Dios, ataviada como una novia que se engalana para su esposo.


contemplarán su rostro y llevarán su nombre grabado en la frente.


El vencedor, pues, vestirá de blanco, y no borraré su nombre del libro de la vida, sino que responderé por él ante mi Padre y ante sus ángeles.


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