1 Corintios 3:16 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento)

¹⁶ ¿Ignoráis acaso que sois templo de Dios y morada del espíritu divino?

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁶ ¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁶ ¿No se dan cuenta de que todos ustedes juntos son el templo de Dios y que el Espíritu de Dios vive en ustedes?

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁶ ¿No saben que son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes?

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁶ ¿No sabéis que sois santuario de Dios, y el Espíritu de Dios mora en vosotros?°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁶ ¿No sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?

1 Corintios 3:16 Referans Kwoze

Juan 14:17

y yo rogaré al Padre para que os envíe otro Abogado que os ayude y esté siempre con vosotros:

Romanos 6:16

Sabéis de sobra que, si os ponéis al servicio de alguien y le obedecéis, os convertís en sus esclavos. Por eso, si es al pecado al que servís, acabaréis en la muerte; si, por el contrario, obedecéis a Dios, alcanzaréis la salvación.

Romanos 6:3

¿No sabéis que, al ser vinculados a Cristo por medio del bautismo, fuimos vinculados también a su muerte?

Romanos 8:11

Y si el Espíritu de Dios, que resucitó a Jesús, vive en vosotros, el mismo que resucitó a Cristo Jesús infundirá nueva vida a vuestros cuerpos mortales por medio de su Espíritu que habita en vosotros.

Romanos 8:9

Pero vosotros no vivís entregados a tales apetencias, sino al Espíritu, ya que el Espíritu de Dios vive en nosotros. El que carece del Espíritu de Cristo, no pertenece a Cristo.

1 Corintios 3:17

Si destruís el templo de Dios, Dios mismo os destruirá a vosotros; no en vano el templo de Dios es algo santo, y vosotros mismos sois ese templo.

1 Corintios 3:9

Lo único que nosotros hacemos es colaborar con Dios; vosotros sois el campo que Dios cultiva, la casa que Dios edifica.

1 Corintios 5:6

¡La cosa no es como para que os sintáis orgullosos! ¿No sabéis que un poco de levadura hace fermentar toda la masa?

1 Corintios 6:16

Porque de sobra sabéis que unirse a una prostituta es hacerse con ella como un solo cuerpo. La misma Escritura lo dice: Los dos vendrán a convertirse en un solo ser.

1 Corintios 6:19

¿No sabéis, en fin, que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo que habéis recibido de Dios y habita en vosotros? Ya no sois los dueños de vosotros mismos.

1 Corintios 6:9

¿Ignoráis acaso que los que hacen el mal no tendrán parte en el reino de Dios? No os llaméis a engaño: ni los lujuriosos,

1 Corintios 9:13

Bien sabéis que los ministros del culto viven de ese ministerio y que los que sirven al altar participan de las ofrendas que se hacen en él.

1 Corintios 9:24

Vosotros sabéis muy bien que de todos los que participan en una competición atlética sólo uno recibe el premio. ¡Corred como para ganar!

2 Corintios 6:16

¿Es que puede haber algo en común entre el templo de Dios y los ídolos? Pues nosotros somos templos de Dios vivo. Así lo ha dicho Dios mismo: En medio de ellos habitaré y caminaré a su lado; yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo.

1 Timoteo 3:15

aunque es posible que me retrase. De ser así, podrás saber por esta carta cómo debes comportarte en la casa de Dios, es decir, en la iglesia del Dios vivo, columna y fundamento de la verdad.

2 Timoteo 1:14

Y conserva este tesoro con la ayuda del Espíritu Santo que habita en nosotros.

Hebreos 3:6

Cristo en cambio, como Hijo que es, está al frente de la casa de Dios. Una casa que somos nosotros, mientras mantengamos esa esperanza confiada y alegre.

Santiago 4:4

¡Gente infiel! ¿No sabéis que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Por tanto, quien pretende tener al mundo por amigo, se hace enemigo de Dios.

1 Pedro 2:5

también vosotros, como piedras vivas, constituís un templo espiritual y un sacerdocio consagrado, que por medio de Jesucristo ofrece sacrificios espirituales y agradables a Dios.

1 Juan 4:12

Es cierto que a Dios jamás le vio nadie; pero, si nos amamos unos a otros, Dios vive en nosotros, y su amor alcanza en nosotros cumbres de perfección.