Salmos 4:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

⁴ Si os enojáis, no pequéis; en la quietud del descanso nocturno examinaos el corazón. Selah

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴ Temblad, y no pequéis; Meditad en vuestro corazón estando en vuestra cama, y callad. Selah

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ No pequen al dejar que el enojo los controle; reflexionen durante la noche y quédense en silencio. Interludio

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ Si tienen rabia, no se arriesguen, guárdenlo para ustedes, en la cama, y quédense luego callados.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ ¡Temblad, y no pequéis!° Meditad° en vuestro corazón sobre vuestro lecho, Estad en silencio. Selah

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ Sabed que el Señor distingue a sus amados, que él me escucha al invocarle.

Salmos 4:4 Referans Kwoze

Job 28:28

Y dijo a los mortales: «Temer al Señor: ¡eso es sabiduría! Apartarse del mal: ¡eso es discernimiento!»

Salmos 119:161

Gente poderosa me persigue sin motivo, pero mi corazón se asombra ante tu palabra.

Salmos 17:6

A ti clamo, oh Dios, porque tú me respondes; inclina a mí tu oído, y escucha mi oración.

Salmos 2:11

Servid al Señor con temor; con temblor rendidle alabanza.

Salmos 3:2

y muchos los que de mí aseguran: «Dios no lo salvará». Selah

Salmos 3:4

Clamo al Señor a gritos, y desde su monte santo él me responde. Selah

Salmos 33:8

Tema toda la tierra al Señor; hónrenlo todos los pueblos del mundo;

Salmos 46:10

«Quedaos quietos, reconoced que yo soy Dios. ¡Yo seré exaltado entre las naciones! ¡Yo seré enaltecido en la tierra!»

Salmos 63:6

En mi lecho me acuerdo de ti; pienso en ti toda la noche.

Proverbios 16:17

El camino del hombre recto evita el mal; el que quiere salvar su vida se fija por dónde va.

Proverbios 16:6

Con amor y verdad se perdona el pecado, y con temor del Señor se evita el mal.

Proverbios 3:7

No seas sabio en tu propia opinión; más bien, teme al Señor y huye del mal.

Jeremías 5:22

¿Acaso has dejado de temerme? —afirma el Señor—. ¿No debieras temblar ante mí? Yo puse la arena como límite del mar, como frontera perpetua e infranqueable. Aunque se agiten sus olas, no podrán prevalecer; aunque bramen, no franquearán esa frontera.

Habacuc 2:20

En cambio, el Señor está en su santo templo; ¡guarde toda la tierra silencio en su presencia!»

2 Corintios 13:5

Examinaos para ver si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿No os dais cuenta de que Cristo Jesús está en vosotros? ¡A menos que fracaséis en la prueba!

Efesios 4:26

«Si os enojáis, no pequéis». No permitáis que el enojo os dure hasta la puesta del sol,