Proverbios 29:7 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

⁷ El justo se ocupa de la causa del desvalido; el malvado ni sabe de qué se trata.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁷ Conoce el justo la causa de los pobres; Mas el impío no entiende sabiduría.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ Los justos se preocupan por los derechos del pobre; al perverso no le importa en absoluto.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ El justo conoce los derechos del pobre, el malo no quiere saber de ellos.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ Preocupa al justo la causa del pobre, Y el malvado no lo entiende.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ El justo comprende la causa de los pobres, el malvado no conoce comprensión.

Proverbios 29:7 Referans Kwoze

Job 29:16

Fui padre de los necesitados y defensor de los extranjeros.

Job 31:13

»Si me negué a hacerles justicia a mis siervos y a mis siervas cuando tuvieron queja contra mí,

Job 31:21

o si he levantado contra el huérfano mi mano por contar con influencias en los tribunales,

Salmos 31:7

Me alegro y me regocijo en tu amor, porque tú has visto mi aflicción y conoces las angustias de mi alma.

Salmos 41:1

Dichoso el que piensa en el débil; el Señor lo librará en el día de la desgracia.

Salmos 72:12

Él librará al indigente que pide auxilio, y al pobre que no tiene quien lo ayude.

Proverbios 21:13

Quien cierra sus oídos al clamor del pobre llorará también sin que nadie le responda.

Jeremías 5:28

gordos y pedantes. Sus obras de maldad no tienen límite: no hacen justicia al huérfano, para que su causa prospere; ni defienden tampoco el derecho de los menesterosos.

Ezequiel 22:7

Tus habitantes tratan con desprecio a su padre y a su madre, oprimen al extranjero, explotan al huérfano y a la viuda.

Gálatas 6:1

Hermanos, si alguien es sorprendido en pecado, vosotros que sois espirituales debéis restaurarlo con una actitud humilde. Pero que cada cual tenga cuidado, porque también puede ser tentado.

1 Samuel 25:25

No hagas tú caso de ese grosero de Nabal, pues le hace honor a su nombre, que significa “necio”. La necedad lo acompaña por todas partes. Yo, por mi parte, no vi a los mensajeros que tú, mi señor, enviaste.