Proverbios 27:20 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

²⁰ El sepulcro, la muerte y los ojos del hombre jamás se dan por satisfechos.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁰ El Seol y el Abadón nunca se sacian; Así los ojos del hombre nunca están satisfechos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁰ Así como la Muerte y la Destrucción nunca se sacian, el deseo del hombre nunca queda satisfecho.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁰ La muerte y el mundo de abajo nunca están satisfechos: lo mismo el deseo humano.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁰ El Seol y el Abadón no se sacian jamás, Así los ojos del hombre nunca están satisfechos.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁰ El seol y el averno son insaciables; tampoco se sacian los ojos del hombre.

Proverbios 27:20 Referans Kwoze

Job 26:6

Ante Dios, queda el sepulcro al descubierto; nada hay que oculte a este destructor.

Proverbios 15:11

Si ante el Señor están el sepulcro y la muerte, ¡cuánto más el corazón humano!

Proverbios 23:5

¿Acaso has podido verlas? ¡No existen! Es como si les salieran alas, pues se van volando como las águilas.

Proverbios 27:19

En el agua se refleja el rostro, y en el corazón se refleja la persona.

Eclesiastés 1:8

Todas las cosas hastían más de lo que es posible expresar. Ni se sacian los ojos de ver, ni se hartan los oídos de oír.

Eclesiastés 4:8

vi a un hombre solitario, sin hijos ni hermanos, y que nunca dejaba de afanarse; ¡jamás le parecían demasiadas sus riquezas! «¿Para quién trabajo tanto, y me abstengo de las cosas buenas?», se preguntó. ¡También esto es absurdo, y una penosa tarea!

Eclesiastés 6:7

Mucho trabaja el hombre para comer, pero nunca se sacia.

Isaías 5:14

Por eso el sepulcro ensancha su garganta, y desmesuradamente abre sus fauces. Allí bajan nobles y plebeyos, con sus juergas y diversiones.

Jeremías 22:17

»Pero tus ojos y tu corazón solo buscan ganancias deshonestas, solo buscan derramar sangre inocente y practicar la opresión y la violencia».

Habacuc 2:5

Además, la riqueza es traicionera; por eso el soberbio no permanecerá. Pues ensancha su garganta como el sepulcro, y es insaciable como la muerte. Reúne en torno suyo todas las naciones y toma cautivos todos los pueblos.

Hageo 1:9

»Esperáis mucho, pero cosecháis poco; lo que almacenáis en vuestra casa, yo lo disipo de un soplo. ¿Por qué? ¡Porque mi casa está en ruinas, mientras vosotros solo os ocupáis de la vuestra! —afirma el Señor Todopoderoso—.

1 Juan 2:16

Porque nada de lo que hay en el mundo —los malos deseos del cuerpo, la codicia de los ojos y la arrogancia de la vida— proviene del Padre, sino del mundo.