Proverbios 24:31 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

³¹ Había espinas por todas partes; la hierba cubría el terreno, y el lindero de piedras estaba en ruinas.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³¹ Y he aquí que por toda ella habían crecido los espinos, Ortigas habían ya cubierto su faz, Y su cerca de piedra estaba ya destruida.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³¹ Vi que habían crecido espinos por todas partes. Estaba cubierto de maleza, y sus muros, destruidos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³¹ ¡ortigas por todas partes, el suelo cubierto de zarzas, el muro de piedras caído!

La Biblia Textual 3a Edicion

³¹ Y he aquí todo estaba cubierto de espinas, Su faz estaba cubierta de ortigas, Y su muro de piedra, derribado.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³¹ y he visto que todo eran ortigas, la maleza cubría el terreno, la cerca se había derrumbado;

Proverbios 24:31 Referans Kwoze

Job 30:7

Bramaban entre los matorrales, se amontonaban entre la maleza.

Job 31:40

¡que nazcan en mi tierra zarzas en vez de trigo, y hierbas en vez de cebada!» Con esto Job dio por terminado su discurso.

Proverbios 13:4

El perezoso ambiciona, y nada consigue; el diligente ve cumplidos sus deseos.

Proverbios 19:23

El temor del Señor conduce a la vida; da un sueño tranquilo y evita los problemas.

Proverbios 20:4

El perezoso no labra la tierra en otoño; en tiempo de cosecha buscará y no hallará.

Proverbios 22:13

«¡Hay un león allí afuera! —dice el holgazán—. ¡En plena calle me va a hacer pedazos!»

Proverbios 23:21

pues borrachos y glotones, por su indolencia, acaban harapientos y en la pobreza.

Proverbios 24:32

Guardé en mi corazón lo observado, y de lo visto saqué una lección:

Eclesiastés 10:18

Por causa del ocio se viene abajo el techo, y por la pereza se desploma la casa.

Isaías 5:5

Voy a deciros lo que haré con mi viña: Le quitaré su cerco, y será destruida; derribaré su muro, y será pisoteada.

Isaías 5:6

La dejaré desolada, y no será podada ni cultivada; le crecerán espinos y cardos. Mandaré que las nubes no lluevan sobre ella.

Jeremías 4:3

Así dice el Señor a los habitantes de Judá y de Jerusalén: «Abrid surcos en terrenos no labrados, y no sembréis entre espinos.

Mateo 13:22

El que recibió la semilla que cayó entre espinos es el que oye la palabra, pero las preocupaciones de esta vida y el engaño de las riquezas la ahogan, de modo que esta no llega a dar fruto.

Mateo 13:7

Otra parte de la semilla cayó entre espinos que, al crecer, la ahogaron.

Hebreos 6:8

En cambio, cuando produce espinos y cardos, no vale nada; está a punto de ser maldecida y acabará por ser quemada.