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Marcos 5:24 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

24 Jesús se fue con él, y lo seguía una gran multitud, que lo apretujaba.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

24 Fue, pues, con él; y le seguía una gran multitud, y le apretaban.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

24 Jesús fue con él, y toda la gente lo siguió, apretujada a su alrededor.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

24 Jesús se fue con Jairo; estaban en medio de un gran gentío, que lo oprimía.

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La Biblia Textual 3a Edicion

24 Y fue con él, y lo seguía una gran multitud, y lo apretujaban.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

24 Jesús se fue con él. Y gran cantidad de pueblo le acompañaba, apretujándolo por todas partes.

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Marcos 5:24
12 Referans Kwoze  

Luego entró en una casa, y de nuevo se aglomeró tanta gente que ni siquiera podían comer él y sus discípulos.


suplicándole con insistencia: ―Mi hijita se está muriendo. Ven y pon tus manos sobre ella para que sane y viva.


Había entre la gente una mujer que hacía doce años que padecía de hemorragias.


―Ves que te apretuja la gente —le contestaron sus discípulos—, y aun así preguntas: “¿Quién me ha tocado?”


Como creciera la multitud, Jesús se puso a decirles: «Esta es una generación malvada. Pide una señal milagrosa, pero no se le dará más señal que la de Jonás.


Mientras tanto, se habían reunido millares de personas, tantas que se atropellaban unas a otras. Jesús comenzó a hablar, dirigiéndose primero a sus discípulos: «Cuidaos de la levadura de los fariseos, o sea, de la hipocresía.


Estaba tratando de ver quién era Jesús, pero la multitud se lo impedía, pues era de baja estatura.


Así que Jesús fue con ellos. No estaba lejos de la casa cuando el centurión mandó unos amigos a decirle: ―Señor, no te tomes tanta molestia, pues no merezco que entres bajo mi techo.


porque su única hija, de unos doce años, se estaba muriendo. Jesús se puso en camino y las multitudes lo apretujaban.


―¿Quién me ha tocado? —preguntó Jesús. Como todos negaban haberlo tocado, Pedro le dijo: ―Maestro, son multitudes las que te aprietan y te oprimen.


Me refiero a Jesús de Nazaret: cómo lo ungió Dios con el Espíritu Santo y con poder, y cómo anduvo haciendo el bien y sanando a todos los que estaban oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.


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