Marcos 1:24 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

²⁴ ―¿Por qué te entrometes, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quién eres tú: ¡el Santo de Dios!

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁴ diciendo: ¡Ah! ¿qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos? Sé quién eres, el Santo de Dios.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁴ «¿Por qué te entrometes con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? ¡Yo sé quién eres: el Santo de Dios!».

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁴ ¿Qué quieres con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé que tú eres el Santo de Dios.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁴ diciendo: ¿Qué tenemos que ver contigo,° Jesús nazareno? ¿Viniste a destruirnos? ¡Sé quién eres: el Santo de Dios!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁴ '¿Qué tenemos nosotros que ver contigo, Jesús Nazareno? ¿Has venido a acabar con nosotros? Yo sé bien quién eres: ¡el Santo de Dios!'.

Marcos 1:24 Referans Kwoze

Salmos 16:10

No dejarás que mi vida termine en el sepulcro; no permitirás que sufra corrupción tu siervo fiel.

Éxodo 14:12

Ya en Egipto te decíamos: “¡Déjanos en paz! ¡Preferimos servir a los egipcios!” ¡Mejor nos hubiera sido servir a los egipcios que morir en el desierto!

Daniel 9:24

»”Setenta semanas han sido decretadas para que tu pueblo y tu santa ciudad pongan fin a sus transgresiones y pecados, pidan perdón por su maldad, establezcan para siempre la justicia, sellen la visión y la profecía, y consagren el lugar santísimo.

Mateo 2:23

y fue a vivir en un pueblo llamado Nazaret. Con esto se cumplió lo dicho por los profetas: «Será llamado nazareno».

Mateo 8:29

De pronto le gritaron: ―¿Por qué te entrometes, Hijo de Dios? ¿Has venido aquí a atormentarnos antes del tiempo señalado?

Marcos 1:23

De repente, en la sinagoga, un hombre que estaba poseído por un espíritu maligno gritó:

Marcos 1:25

―¡Cállate! —lo reprendió Jesús—. ¡Sal de ese hombre!

Marcos 10:47

Al oír que el que venía era Jesús de Nazaret, se puso a gritar: ―¡Jesús, Hijo de David, ten compasión de mí!

Marcos 14:67

Cuando vio a Pedro calentándose, se fijó en él. ―Tú también estabas con ese nazareno, con Jesús —le dijo ella.

Marcos 16:6

―No os asustéis —les dijo—. Buscáis a Jesús el nazareno, el que fue crucificado. ¡Ha resucitado! No está aquí. Mirad el lugar donde lo pusieron.

Marcos 5:7

―¿Por qué te entrometes, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? —gritó con fuerza—. ¡Te ruego por Dios que no me atormentes!

Lucas 1:35

―El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Así que al santo niño que va a nacer lo llamarán Hijo de Dios.

Lucas 24:19

―¿Qué es lo que ha pasado? —les preguntó. ―Lo de Jesús de Nazaret. Era un profeta, poderoso en obras y en palabras delante de Dios y de todo el pueblo.

Lucas 4:34

―¡Ah! ¿Por qué te entrometes, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quién eres tú: ¡el Santo de Dios!

Lucas 8:28

Cuando vio a Jesús, dio un grito y se arrojó a sus pies. Entonces exclamó con fuerza: ―¿Por qué te entrometes, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? ¡Te ruego que no me atormentes!

Lucas 8:37

Entonces toda la gente de la región de los gerasenos le pidió a Jesús que se fuera de allí, porque les había entrado mucho miedo. Así que él subió a la barca para irse.

Juan 6:69

Y nosotros hemos creído, y sabemos que tú eres el Santo de Dios.

Hechos 2:27

No dejarás que mi vida termine en el sepulcro; no permitirás que tu santo sufra corrupción.

Hechos 24:5

Hemos descubierto que este hombre es una plaga que por todas partes anda provocando disturbios entre los judíos. Es cabecilla de la secta de los nazarenos.

Hechos 3:14

Rechazasteis al Santo y Justo, y pedisteis que se indultara a un asesino.

Hechos 4:27

En efecto, en esta ciudad se reunieron Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y con el pueblo de Israel, contra tu santo siervo Jesús, a quien ungiste

Santiago 2:19

¿Tú crees que hay un solo Dios? ¡Magnífico! También los demonios lo creen, y tiemblan.

1 Juan 2:20

Todos vosotros, en cambio, habéis recibido unción del Santo, de manera que conocéis la verdad.

Apocalipsis 3:7

»Escribe al ángel de la iglesia de Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y nadie puede cerrar, el que cierra y nadie puede abrir: