Job 4:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

⁴ tú, que con tus palabras sostenías a los que tropezaban y fortalecías las rodillas que flaqueaban;

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴ Al que tropezaba enderezaban tus palabras, Y esforzabas las rodillas que decaían.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ Tus palabras daban apoyo a los que caían; animabas a los de rodillas temblorosas.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ Con tu palabra sostenías a aquel que vacilaba, robustecías las piernas de los endebles;'

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ Tus palabras sostenían al que tambaleaba, Y afirmabas las rodillas decaídas.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ que con tus palabras sostenías a los vacilantes, robustecías las rodillas que se rinden.

Job 4:4 Referans Kwoze

Job 29:11

Los que me oían, hablaban bien de mí; los que me veían, me alababan.

Job 29:25

Yo les indicaba el camino a seguir; me sentaba a la cabecera; habitaba entre ellos como un rey entre su tropa, como quien consuela a los que están de luto.

Job 4:3

Tú, que impartías instrucción a las multitudes y fortalecías las manos decaídas;

Job 4:5

¡ahora que afrontas las calamidades, no las resistes!; ¡te ves golpeado y te desanimas!

Salmos 145:14

El Señor levanta a los caídos y sostiene a los agobiados.

Proverbios 12:18

El charlatán hiere con la lengua como con una espada, pero la lengua del sabio brinda alivio.

Proverbios 25:11

Como naranjas de oro con incrustaciones de plata son las palabras dichas a tiempo.

Isaías 50:4

El Señor omnipotente me ha concedido tener una lengua instruida, para sostener con mi palabra al fatigado. Todas las mañanas me despierta, y también me despierta el oído, para que escuche como los discípulos.

Daniel 5:6

el rostro le palideció del susto, las rodillas comenzaron a temblarle y apenas podía sostenerse.

2 Corintios 2:7

Más bien debierais perdonarlo y consolarlo para que no sea consumido por la excesiva tristeza.

2 Corintios 7:6

Pero Dios, que consuela a los abatidos, nos consoló con la llegada de Tito,

1 Tesalonicenses 5:14

Hermanos, también os rogamos que amonestéis a los holgazanes, estimuléis a los desanimados, ayudéis a los débiles y seáis pacientes con todos.

Hebreos 12:12

Por tanto, renovad las fuerzas de vuestras manos cansadas y de vuestras rodillas debilitadas.