Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt
- Piblisite -





Hebreos 12:9 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

9 Después de todo, aunque nuestros padres humanos nos disciplinaban, los respetábamos. ¿No hemos de someternos, con mayor razón, al Padre de los espíritus, para que vivamos?

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

9 Por otra parte, tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, y los venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre de los espíritus, y viviremos?

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Ya que respetábamos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, ¿acaso no deberíamos someternos aún más a la disciplina del Padre de nuestro espíritu, y así vivir para siempre?

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Además, cuando nuestros padres según la carne nos corregían, los respetábamos. ¿No deberíamos someternos con mayor razón al Padre de los espíritus para tener vida?

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

9 Además, nosotros hemos tenido a nuestros padres naturales, los cuales nos castigaban, y los respetábamos. ¿No nos hemos de someter con mucha más razón al Padre de los espíritus, y vivir?

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Más aún, teníamos a nuestros padres carnales que nos corregían, y los respetábamos. ¿No nos someteremos con mayor razón al Padre de los espíritus, y así tendremos vida?

Gade chapit la Kopi




Hebreos 12:9
28 Referans Kwoze  

En sus manos está la vida de todo ser vivo, y el hálito que anima a todo ser humano.


»Honra a tu padre y a tu madre, para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da el Señor tu Dios.


»Al que mira con desdén a su padre, y rehúsa obedecer a su madre, que los cuervos del valle le saquen los ojos y que se lo coman vivo los buitres.


Volverá entonces el polvo a la tierra, como antes fue, y el espíritu volverá a Dios, que es quien lo dio.


Señor, por tales cosas viven los hombres, y también mi espíritu encuentra vida en ellas. Tú me devolviste la salud y me diste vida.


Así dice Dios, el Señor, el que creó y desplegó los cielos; el que extendió la tierra y todo lo que ella produce; el que da aliento al pueblo que la habita, y vida a los que en ella se mueven:


¡Ay del que le reprocha a su padre: «¡Mira lo que has engendrado!»! ¡Ay del que le reclama a su madre: «¡Mira lo que has dado a luz!»!


Mi litigio no será eterno, ni estaré siempre enojado, porque ante mí desfallecerían todos los seres vivientes que he creado.


Tus habitantes tratan con desprecio a su padre y a su madre, oprimen al extranjero, explotan al huérfano y a la viuda.


»Respetad todos vosotros a vuestra madre y a vuestro padre, y observad mis sábados. Yo soy el Señor vuestro Dios.


Esta profecía es la palabra del Señor con respecto a Israel. Afirma el Señor, que extendió los cielos, que echó los cimientos de la tierra, y que puso en el hombre aliento de vida:


»El hijo honra a su padre y el siervo, a su señor. Ahora bien, si soy padre, ¿dónde está el honor que merezco? Y, si soy señor, ¿dónde está el respeto que se me debe? Yo, el Señor Todopoderoso, os pregunto a vosotros, sacerdotes que despreciáis mi nombre. »Y encima preguntáis: “¿En qué hemos despreciado tu nombre?”


Pero Moisés y Aarón se postraron rostro en tierra, y exclamaron: ―Señor, Dios de toda la humanidad: un solo hombre ha pecado, ¿y vas tú a enojarte con todos ellos?


―Dígnate, Señor, Dios de toda la humanidad, nombrar un jefe sobre esta comunidad,


Les dijo: «Había en cierto pueblo un juez que no tenía temor de Dios ni consideración por nadie.


Durante algún tiempo él se negó, pero por fin concluyó: “Aunque no temo a Dios ni tengo consideración por nadie,


Lo que nace del cuerpo es cuerpo; lo que nace del Espíritu es espíritu.


Era profeta y sabía que Dios le había prometido bajo juramento poner en el trono a uno de sus descendientes.


Este evangelio habla de su Hijo, que según la naturaleza humana era descendiente de David,


Desearía yo mismo ser maldecido y separado de Cristo por el bien de mis hermanos, los de mi propia raza,


De ellos son los patriarcas, y de ellos, según la naturaleza humana, nació Cristo, quien es Dios sobre todas las cosas. ¡Alabado sea por siempre! Amén.


“Maldito sea quien deshonre a su padre o a su madre”. Y todo el pueblo dirá: “¡Amén!”


Humillaos delante del Señor, y él os exaltará.


Así que someteos a Dios. Resistid al diablo, y él huirá de vosotros.


Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte a su debido tiempo.


El ángel me dijo: «Estas palabras son verdaderas y dignas de confianza. El Señor, el Dios que inspira a los profetas, ha enviado a su ángel para mostrar a sus siervos lo que tiene que suceder sin demora».


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite