Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Deuteronomio 7:3 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

3 Tampoco te unirás en matrimonio con ninguna de esas naciones; no darás tus hijas a sus hijos ni tomarás sus hijas para tus hijos,

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

3 Y no emparentarás con ellas; no darás tu hija a su hijo, ni tomarás a su hija para tu hijo.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

3 No te unas en matrimonio con su gente. No permitas que tus hijas ni tus hijos se casen con los hijos o las hijas de esas naciones,

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

3 No te emparentarás con ellas, dando tus hijas a sus hijos, ni tomando sus hijas para tus hijos,

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

3 No emparentarás con ellas, no darás tus hijos a sus hijas ni tomarás sus hijas para tus hijos,

Gade chapit la Kopi




Deuteronomio 7:3
14 Referans Kwoze  

y júrame por el Señor, el Dios del cielo y de la tierra, que no tomarás de esta tierra de Canaán, donde yo habito, una mujer para mi hijo


que procedían de naciones de las cuales el Señor había dicho a los israelitas: «No os unáis a ellas, ni ellas a vosotros, porque ciertamente desviarán vuestro corazón para que sigáis a otros dioses». Con tales mujeres se unió Salomón y tuvo amoríos.


Como si hubiera sido poco el cometer los mismos pecados de Jeroboán hijo de Nabat, también se casó con Jezabel hija de Et Baal, rey de los sidonios, y se dedicó a servir a Baal y a adorarlo.


Hagamos un pacto con nuestro Dios, comprometiéndonos a expulsar a todas estas mujeres y a sus hijos, conforme al consejo que nos has dado tú, y todos los que aman el mandamiento de Dios. ¡Que todo se haga de acuerdo con la ley!


Por eso, no permitáis vosotros que vuestras hijas ni vuestros hijos se casen con los de esos pueblos. Nunca busquéis el bienestar ni la prosperidad que tienen ellos, para que vosotros os mantengáis fuertes y comáis de los frutos de la buena tierra y luego se la dejéis por herencia a vuestros descendientes para siempre”.


Además, todos nos comprometimos a no casar a nuestras hijas con los habitantes del país ni aceptar a sus hijas como esposas para nuestros hijos.


Pero sus padres le dijeron: ―¿Acaso no hay ninguna mujer aceptable entre tus parientes, o en todo nuestro pueblo, que tienes que ir a buscar una esposa entre esos filisteos incircuncisos? Sansón le respondió a su padre: ―¡Pídeme a esa, que es la que a mí me gusta!


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite