Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt
- Piblisite -





1 Samuel 6:9 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

9 y observadla. Si se va en dirección de Bet Semes, su propio territorio, eso quiere decir que el Señor es quien nos ha causado esta calamidad tan terrible. Pero, si la carreta se desvía para otro lugar, sabremos que no fue él quien nos hizo daño, sino que todo ha sido por casualidad».

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

9 Y observaréis; si sube por el camino de su tierra a Bet-semes, él nos ha hecho este mal tan grande; y si no, sabremos que no es su mano la que nos ha herido, sino que esto ocurrió por accidente.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Si cruzan la frontera de nuestra tierra y van hacia Bet-semes, sabremos que fue el Señor quien trajo este terrible desastre sobre nosotros. Si no la cruzan, sabremos que no fue la mano de Dios que causó esta plaga; más bien sucedió por pura casualidad.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Miren entonces. Si el Arca se va a su país en dirección a Bet-Semés, su Dios fue seguramente el que nos trajo estas plagas. Si no, sabremos que no fue su mano la que nos castigó, sino que todo esto nos pasó por casualidad'.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

9 Y observaréis: Si sube por el camino de su territorio hacia Bet-semes, Él nos ha hecho este gran mal, pero si no, entonces sabremos que no es su mano la que nos ha herido, sino que nos ocurrió por accidente.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Fijaos bien: si toma el camino de su país y sube hacia Bet Semes, es Yahveh quien nos ha traído esta gran calamidad; en caso contrario, sabremos que no fue su mano la que nos hirió, sino que esto nos ha sucedido por casualidad'.

Gade chapit la Kopi




1 Samuel 6:9
13 Referans Kwoze  

―Por casualidad me encontraba yo en el monte Guilboa. De pronto, vi a Saúl apoyado en su lanza y asediado por los carros y la caballería —respondió el criado—.


Ben Decar, en Macaz, Salbín, Bet Semes y Elón Bet Janán;


Entonces Joás, rey de Israel, marchó a Bet Semes, que está en Judá, para enfrentarse con él.


Pero, en cuanto el faraón experimentó alivio, endureció su corazón y, tal como el Señor lo había advertido, ya no quiso saber nada de Moisés ni de Aarón.


Me fijé en que en esta vida la carrera no la ganan los más veloces, ni ganan la batalla los más valientes; que tampoco los sabios tienen qué comer, ni los inteligentes abundan en dinero, ni los instruidos gozan de simpatía, sino que a todos les llegan buenos y malos tiempos.


Levantada está, Señor, tu mano, pero ellos no la ven. ¡Que vean tu celo por el pueblo, y sean avergonzados; que sean consumidos por el fuego destinado a tus enemigos!


¿Se toca la trompeta en la ciudad sin que el pueblo se alarme? ¿Ocurrirá en la ciudad alguna desgracia que el Señor no haya provocado?


Resulta que viajaba por el mismo camino un sacerdote, quien, al verlo, se desvió y siguió de largo.


De allí giraba al oeste de Balá y se dirigía hacia el monte Seír, bordeaba por el norte las laderas del monte Yearín, llamado también Quesalón, y descendía hacia Bet Semes, pasando por Timná.


Ayin, Yutá y Bet Semes, nueve poblaciones en total.


Así lo hicieron. Tomaron dos vacas con cría y las ataron a la carreta, pero encerraron los becerros en el establo.


¡Y las vacas se fueron mugiendo por todo el camino, directamente a Bet Semes! Siguieron esa ruta sin desviarse para ningún lado. Los jefes de los filisteos se fueron detrás de la carreta, hasta llegar al territorio de Bet Semes.


―Si pensáis devolverla —contestaron—, no la mandéis sin nada; tenéis que presentarle a Dios una ofrenda compensatoria. Entonces recobraréis la salud y sabréis por qué Dios no ha dejado de castigaros.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite