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1 Corintios 9:14 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

14 Así también el Señor ha ordenado que quienes predican el evangelio vivan de este ministerio.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

14 Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

14 Del mismo modo, el Señor ordenó que los que predican la Buena Noticia sean sostenidos por los que reciben el beneficio del mensaje.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

14 El Señor ha ordenado, de igual manera, que los que anuncian el Evangelio vivan del Evangelio.

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La Biblia Textual 3a Edicion

14 Así también ordenó el Señor a los que proclaman el evangelio, que vivan del evangelio.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 De la misma manera, el Señor dispuso que quienes anuncian el evangelio, del evangelio vivan.

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1 Corintios 9:14
13 Referans Kwoze  

ni bolsa para el camino, ni dos mudas de ropa, ni sandalias, ni bastón; porque el trabajador merece que se le dé su sustento.


Quedaos en esa casa, y comed y bebed de lo que ellos tengan, porque el trabajador tiene derecho a su sueldo. No andéis de casa en casa.


»Cuando entréis en un pueblo y os reciban, comed lo que os sirvan.


y, como hacía tiendas de campaña al igual que ellos, se quedó para trabajar juntos.


De hecho, aunque tuvierais miles de tutores en Cristo, padres sí que no tenéis muchos, porque mediante el evangelio yo fui el padre que os engendró en Cristo Jesús.


Si hemos sembrado semilla espiritual entre vosotros, ¿será mucho pedir que cosechemos de vosotros lo material?


Si otros tienen derecho a este sustento de parte vuestra, ¿no lo tendremos aún más nosotros? Sin embargo, no ejercimos este derecho, sino que lo soportamos todo con tal de no crear obstáculo al evangelio de Cristo.


Sin embargo, cuando predico el evangelio, no tengo de qué enorgullecerme, ya que estoy bajo la obligación de hacerlo. ¡Ay de mí si no predico el evangelio!


¿Acaso no tenemos derecho a comer y a beber?


Ahora bien, cuando llegué a Troas para predicar el evangelio de Cristo, descubrí que el Señor me había abierto las puertas.


El que recibe instrucción en la palabra de Dios comparta todo lo bueno con quien le enseña.


porque nuestro evangelio os llegó no solo con palabras, sino también con poder, es decir, con el Espíritu Santo y con profunda convicción. Como bien sabéis, estuvimos entre vosotros buscando vuestro bien.


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