Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt
- Piblisite -





1 Corintios 3:16 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

16 ¿No sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

16 ¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

16 ¿No se dan cuenta de que todos ustedes juntos son el templo de Dios y que el Espíritu de Dios vive en ustedes?

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

16 ¿No saben que son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes?

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

16 ¿No sabéis que sois santuario de Dios, y el Espíritu de Dios mora en vosotros?°

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 ¿No sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?

Gade chapit la Kopi




1 Corintios 3:16
24 Referans Kwoze  

Infundiré mi Espíritu en vosotros, y haré que sigáis mis preceptos y obedezcáis mis leyes.


el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede aceptar porque no lo ve ni lo conoce. Pero vosotros sí lo conocéis, porque vive con vosotros y estará en vosotros.


¿Acaso no sabéis que, cuando os entregáis a alguien para obedecerlo, sois esclavos de aquel a quien obedecéis? Claro que lo sois, ya sea del pecado que lleva a la muerte, o de la obediencia que lleva a la justicia.


¿Acaso no sabéis que todos los que fuimos bautizados para unirnos con Cristo Jesús en realidad fuimos bautizados para participar en su muerte?


Y, si el Espíritu de aquel que levantó a Jesús de entre los muertos vive en vosotros, el mismo que levantó a Cristo de entre los muertos también dará vida a vuestros cuerpos mortales por medio de su Espíritu, que vive en vosotros.


Sin embargo, vosotros no vivís según la naturaleza pecaminosa, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios vive en vosotros. Y, si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de Cristo.


Si alguno destruye el templo de Dios, él mismo será destruido por Dios; porque el templo de Dios es sagrado, y vosotros sois ese templo.


En efecto, nosotros somos colaboradores al servicio de Dios; y vosotros sois el campo de cultivo de Dios, sois el edificio de Dios.


Hacéis mal en jactaros. ¿No os dais cuenta de que un poco de levadura hace fermentar toda la masa?


¿No sabéis que el que se une a una prostituta se hace un solo cuerpo con ella? Pues la Escritura dice: «Los dos llegarán a ser un solo cuerpo».


¿Acaso no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en vosotros y que habéis recibido de parte de Dios? No sois vosotros vuestros propios dueños;


¿No sabéis que los malvados no heredarán el reino de Dios? ¡No os dejéis engañar! Ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los sodomitas, ni los pervertidos sexuales,


¿No sabéis que los que sirven en el templo reciben su alimento del templo, y que los que atienden el altar participan de lo que se ofrece en el altar?


¿No sabéis que en una carrera todos los corredores compiten, pero solo uno obtiene el premio? Corred, pues, de tal modo que lo obtengáis.


¿En qué concuerdan el templo de Dios y los ídolos? Porque nosotros somos templo del Dios viviente. Como él ha dicho: «Viviré con ellos y caminaré entre ellos. Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo». Por tanto, el Señor añade:


si me retraso, sepas cómo hay que portarse en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y fundamento de la verdad.


Con el poder del Espíritu Santo que vive en nosotros, cuida la preciosa enseñanza que se te ha confiado.


Cristo, en cambio, es fiel como Hijo al frente de la casa de Dios. Y esa casa somos nosotros, con tal que mantengamos nuestra confianza y la esperanza que nos enorgullece.


¡Oh gente adúltera! ¿No sabéis que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Si alguien quiere ser amigo del mundo, se vuelve enemigo de Dios.


también vosotros sois como piedras vivas, con las cuales se está edificando una casa espiritual. De este modo llegáis a ser un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales que Dios acepta por medio de Jesucristo.


Nadie ha visto jamás a Dios, pero, si nos amamos los unos a los otros, Dios permanece entre nosotros, y entre nosotros su amor se ha manifestado plenamente.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite