Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





2 Reyes 21:9 - Biblia Nacar-Colunga

9 Pero ellos no obedecieron, y Manases fue causa de que se descarriaran e hicieran el mal, más todavía que las gentes que Yahvé había destruido ante los hijos de Israel.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

9 Mas ellos no escucharon; y Manasés los indujo a que hiciesen más mal que las naciones que Jehová destruyó delante de los hijos de Israel.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Sin embargo, la gente se negó a escuchar, y Manasés los llevó a cometer cosas aún peores que las que habían hecho las naciones paganas que el Señor había destruido cuando el pueblo de Israel entró en la tierra.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Pero no hicieron caso y Manasés los arrastró a hacer cosas peores aún que las hechas por las naciones que había destruido Yavé ante los israelitas.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

9 Pero no escucharon, pues Manasés los indujo a hacer el mal, más que las otras naciones a las que YHVH había destruido delante de los hijos de Israel.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Pero ellos no obedecieron y Manasés les indujo a hacer el mal, hasta el punto de hacer cosas peores que las que hacían las naciones que Yahveh había exterminado delante de Israel.

Gade chapit la Kopi




2 Reyes 21:9
25 Referans Kwoze  

Entregará a Israel por los pecados que ha cometido Jeroboam y los que ha hecho cometer a Israel.”


Marchó por el camino de los reyes de Israel, y hasta hizo pasar a su hijo por el fuego, según las abominaciones de las gentes que Yahvé había expulsado ante los hijos de Israel.


Entonces Yahvé habló por medio de sus siervos los profetas, diciendo:


Descarrió Manases a Judá y a los moradores de Jerusalén, para hacer peor todavía que las gentes que Yahvé destruyó ante los hijos de Israel.


Pero ellos hicieron escarnio de los mensajeros de Dios y menospreciaron sus palabras, burlándose de sus profetas, hasta que subió la ira de Dios contra su pueblo y ya no hubo remedio.


Pero te irritaron rebelándose contra ti, y echaron tu Ley a sus espaldas; y mataron a tus profetas, que los reprendían para convertirlos a ti, e hicieron grandes abominaciones.'


Tú, Yahvé, nos guardarás, tú nos protegerás para siempre de esta generación.


No haya en ti dios ajeno, no adores a ningún dios extranjero.


El príncipe que da oídos a la mentira, tendrá ministros todos malos.


y sabréis que yo soy Yahvé, cuyos mandamientos no habéis seguido, cuyas leyes no habéis practicado, sino que habéis obrado siguiendo las costumbres de las gentes que os rodean.


Y ni aun seguiste sólo sus caminos, ni imitaste sólo sus abominaciones; como si esto fuera muy poco para ti, te corrompiste más que ellas en todas tus sendas.'


Di, pues: Así habla el Señor, Yahvé: ¡Ay de la ciudad derramadora de sangre en medio de sí! Para que llegue su hora y para su ruina se ha hecho ídolos, contaminándose.


Ella se rebeló contra mis mandatos, malvada, más que las gentes, y contra mis leyes, más que las tierras que están en torno suyo, despreciando mis mandamientos y mis leyes y no andando por ellos.


Por tanto, así dice Yahvé: Por ser más rebelde que las gentes que os rodean, y no haber seguido mis mandamientos, y no haber obrado según mis leyes, y hasta ni siquiera no haber hecho según las costumbres de las gentes que están en torno vuestro,


no hemos hecho caso a tus siervos los profetas, que en tu nombre hablaron a nuestros reyes, a nuestros príncipes y a todo el pueblo de la tierra.


Efraím está oprimido, conculcado el derecho, porque se esfuerza en seguir la regla.


Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos como el ave a su nidada debajo de las alas, y no quisiste!


Si no hubiera venido y les hubiera hablado, no tendrían pecado; pero ahora no tienen excusa de su pecado.'


Pues al que sabe hacer el bien y no lo hace, se le imputa a pecado.


Pero tengo contra ti que permites a Jezabel, esa que a sí misma se dice profetisa, enseñar y extraviar a mis siervos hasta hacerlos fornicar y comer de los sacrificios de los ídolos.


El pueblo desoyó a Samuel, y dijeron: “No, no, que haya sobre nosotros un rey,


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite