| Hebreos 2:4 - Biblia Lenguaje Sencillo (Nuevo Testamento)4 Dios también nos lo demostró por medio de muchas señales, y de acciones maravillosas, y también con milagros. Además, cuando lo hizo, les dio el Espíritu Santo a quienes él se lo quiso dar. Jesús nos salvaGade chapit la Plis vèsyonBiblia Reina Valera 19604 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.Gade chapit la Biblia Nueva Traducción Viviente4 Además, Dios confirmó el mensaje mediante señales, maravillas, diversos milagros y dones del Espíritu Santo según su voluntad.Gade chapit la Biblia Católica (Latinoamericana)4 Dios ha confirmado su testimonio con señales, prodigios y milagros de toda clase, sin hablar de los dones del Espíritu, que reparte como quiere.Gade chapit la La Biblia Textual 3a Edicion4 testificando Dios juntamente con ellos mediante señales y prodigios, y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo, conforme a su propia voluntad.Gade chapit la Biblia Serafín de Ausejo 19754 y el mismo Dios abonaba su testimonio con señales prodigios y con toda suerte de milagros y dones de Espíritu Santo, repartidos según su voluntad.Gade chapit la | 
Y los discípulos, por su parte, salieron a anunciar por todas partes las fbuenas noticias del reino. El Señor Jesús los acompañaba y los ayudaba por medio de señales fmilagrosas, y así Dios demostraba que los discípulos predicaban el mensaje verdadero. fAmén. Otra manera de finalizar el libro de Marcos
Pero los que dejan de creer en Cristo ya no pueden volver a ser amigos de Dios. Aunque alguna vez hayan creído que el mensaje de Dios es la verdad, y con gusto lo hayan recibido como un regalo de Dios, ya no es posible hacerlos cambiar. Aunque hayan recibido el Espíritu Santo junto con los demás, y hayan sabido lo bueno que es el mensaje de Dios y lo poderoso que Dios será en el nuevo mundo, no podrán volver a él si dejan de creer. En realidad, lo que ellos hacen es volver a clavar a Cristo en la cruz y burlarse de él ante todo el mundo.