Salmos 34:22 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

²² Tau El SEÑOR redime el alma de sus siervos; y no serán asolados cuantos en él confían.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²² Jehová redime el alma de sus siervos, Y no serán condenados cuantos en él confían.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²² Pero el Señor redimirá a los que le sirven; ninguno que se refugie en él será condenado.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²² Pero el Señor libra el alma de sus siervos, el que se ampara en él no tendrá que pagar.

La Biblia Textual 3a Edicion

²² YHVH redimirá el alma de sus siervos, No serán condenados cuantos en Él confían.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²² Tau. El impío perece en su maldad, el que aborrece al justo es inculpado;

Salmos 34:22 Referans Kwoze

Génesis 48:16

el Angel que me liberta de todo mal, bendiga a estos jóvenes; y mi nombre sea llamado en ellos, y el nombre de mis padres Abraham e Isaac; y se multipliquen en gran manera en medio de la tierra.

2 Samuel 4:9

Y David respondió a Recab y a su hermano Baana, hijos de Rimón Beerotita, y les dijo: Vive el SEÑOR que ha redimido mi alma de toda angustia,

1 Reyes 1:29

Y el rey juró, diciendo: Vive el SEÑOR, que ha redimido mi alma de toda angustia,

Salmos 103:4

el que rescata del hoyo tu vida, el que te corona de favores y misericordia;

Salmos 130:8

Y él redimirá a Israel de todos sus pecados.

Salmos 31:5

En tu mano encomendaré mi espíritu; tú me redimirás, oh SEÑOR, Dios de verdad.

Salmos 37:12

Zain Piensa el impío contra el justo, y cruje sobre él sus dientes.

Salmos 37:15

La espada de ellos entrará en su mismo corazón, y su arco será quebrado.

Salmos 71:23

Mis labios se alegrarán cuando cantare alabanzas a ti; y mi alma, a la cual redimiste.

Lamentaciones 3:58

Resh : Abogaste, Señor, la causa de mi alma; redimiste mi vida.

1 Pedro 1:5

para vosotros que sois guardados en la virtud de Dios por fe, para alcanzar la salud que está aparejada para ser manifestada en el postrer tiempo.

Apocalipsis 5:9

y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro, y de abrir sus sellos; porque tú fuiste muerto, y nos has redimido para Dios con tu sangre, de todo linaje y lengua y pueblo y nación;