Mateo 21:37 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

³⁷ Y a la postre les envió su hijo, diciendo: Tendrán respeto a mi hijo.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³⁷ Finalmente les envió su hijo, diciendo: Tendrán respeto a mi hijo.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁷ »Finalmente, el dueño envió a su propio hijo porque pensó: “Sin duda, respetarán a mi hijo”.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁷ Por último envió a su hijo, pensando: 'A mi hijo lo respetarán'.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁷ Finalmente, les envió a su hijo, pensando: Respetarán a mi hijo.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁷ Finalmente, les envió a su propio hijo, pensando: 'A mi hijo lo respetarán'.

Mateo 21:37 Referans Kwoze

Isaías 5:4

¿Qué más se había de hacer a mi viña, que yo no hice en ella? ¿Cómo, esperando yo que diese uvas, ha dado uvas silvestres?

Jeremías 36:3

Si por ventura oyere la Casa de Judá todo el mal que yo pienso hacerles, para que se torne cada uno de su mal camino, y yo perdonaré su maldad y su pecado.

Sofonías 3:7

Diciendo: Ciertamente ahora me temerás; recibirás castigo, y no será derribada su habitación, todo lo cual yo visité sobre ella; mas ellos se levantaron de mañana y corrompieron todas sus obras.

Mateo 21:36

Envió de nuevo otros siervos, más que los primeros; e hicieron con ellos de la misma manera.

Mateo 21:38

Mas los labradores, viendo al hijo, dijeron entre sí: Este es el heredero; venid, matémosle, y tomemos su heredad.

Mateo 3:17

Y he aquí una voz de los cielos que decía: Este es mi Hijo amado, en el cual tengo contentamiento.

Marcos 12:6

Teniendo pues aún un hijo suyo amado, lo envió también a ellos el postrero, diciendo: Tendrán en reverencia a mi hijo.

Lucas 20:13

Entonces el señor de la viña dijo: ¿Qué haré? Enviaré mi hijo amado; quizás cuando a éste vieren, tendrán respeto.

Juan 1:18

A Dios nadie le vio jamás; el Unigénito hijo, que está en el seno del Padre, él nos lo declaró.

Juan 1:34

Y yo le vi, y he dado testimonio que éste es el Hijo de Dios.

Juan 3:16

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.