Isaías 23:8 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

⁸ ¿Quién decretó esto sobre Tiro, la coronada, cuyos negociantes eran príncipes, cuyos mercaderes eran los nobles de la tierra?

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁸ ¿Quién decretó esto sobre Tiro, la que repartía coronas, cuyos negociantes eran príncipes, cuyos mercaderes eran los nobles de la tierra?

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ ¿Quién hizo caer este desastre sobre Tiro, la gran fundadora de reinos? Sus comerciantes eran todos príncipes; sus mercaderes, nobles.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ ¿Quién es, pues, el que ha tramado esto en contra de Tiro, la reina, cuyos comerciantes eran príncipes y sus negociantes, los grandes de la tierra?

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ ¿Quién decretó tal cosa sobre Tiro, que regalaba coronas, Cuyos comerciantes eran príncipes Y sus mercaderes° los nobles de la tierra?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ ¿Quién planeó esto contra Tiro, la distribuidora de coronas, cuyos traficantes eran príncipes, sus mercaderes, magnates del país?

Isaías 23:8 Referans Kwoze

Isaías 10:8

Porque él dirá: Mis príncipes ¿no son todos reyes?

Isaías 36:9

¿Cómo, pues, harás volver el rostro de un capitán de los más pequeños siervos de mi Señor, aunque estés confiado en Egipto por sus carros y hombres de a caballo?

Ezequiel 26:12

Y robarán tus riquezas, y saquearán tus mercaderías; y arruinarán tus muros, y tus casas preciosas destruirán; y pondrán tus piedras y tu madera y tu tierra en medio de las aguas.

Nahum 3:16

Multiplicaste tus mercaderes más que las estrellas del cielo; el pulgón hizo presa, y voló.

Zacarías 9:3

Porque Tiro se edificó fortaleza, y amontonó plata como polvo, y oro como lodo de las calles,

Apocalipsis 18:23

y luz de lámpara no alumbrará más en ti; y voz de esposo y de esposa no será más oída en ti: cuyos mercaderes eran príncipes de la tierra: en cuyas hechicerías todos los gentiles han errado.

Apocalipsis 18:8

Por lo cual en un día vendrán sus plagas, muerte, llanto y hambre, y será quemada con fuego; porque el Señor Dios es fuerte, que la juzgará.