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Hechos 24:14 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

14 Pero esto te confieso, que conforme a aquel Camino que ellos llaman secta, así sirvo al Dios de mi patria, creyendo todas las cosas que en la ley y en los profetas están escritas;

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Biblia Reina Valera 1960

14 Pero esto te confieso, que según el Camino que ellos llaman herejía, así sirvo al Dios de mis padres, creyendo todas las cosas que en la ley y en los profetas están escritas;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

14 »Pero admito que soy seguidor del Camino, al cual ellos llaman secta. Adoro al Dios de nuestros antepasados y firmemente creo en la ley judía y en todo lo que escribieron los profetas.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

14 Pero sí admito ante ti que sirvo al Dios de nuestros padres según nuestro camino, que ellos llaman secta. Creo en todo lo que está escrito en la Ley y los Profetas

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La Biblia Textual 3a Edicion

14 Pero esto te confieso, que según el Camino que ellos llaman secta, así sirvo al Dios de mis antepasados, creyendo todo lo que es conforme a la ley y lo que está escrito en los profetas,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Una cosa sí te confieso: que sirvo al Dios de mis padres según el Camino que llaman secta, creyendo todo lo que está de acuerdo con la ley y escrito en los profetas,

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Hechos 24:14
44 Referans Kwoze  

SEÑOR, Dios de Abraham, de Isaac, y de Israel, nuestros padres, conserva perpetuamente esta voluntad del corazón de tu pueblo, y encamina su corazón a ti.


Y hablaré de tus testimonios delante de los reyes, y no me avergonzaré.


Y dijo más Dios a Moisés: Así dirás a los hijos de Israel: El SEÑOR Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob, me ha enviado a vosotros. Este es mi Nombre para siempre, y este es mi memorial por todos los siglos.


Los que juran por el pecado de Samaria, y dicen: Vive tu Dios de Dan; y: Vive el camino de Beerseba, caerán, y nunca más se levantarán.


Y vendrán muchos gentiles, y dirán: Venid, y subamos al monte del SEÑOR, y a la Casa del Dios de Jacob; y nos enseñará en sus caminos, y andaremos por sus veredas; porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra del SEÑOR.


Cualquiera pues que me confesare delante de los hombres, le confesaré yo también delante de mi Padre que está en los cielos.


De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas.


Así que, todas las cosas que quisiereis que los hombres hiciesen con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esta es la ley y los profetas.


como habló por boca de los santos que fueron desde el principio, sus profetas:


La ley y los profetas hasta Juan; desde entonces el Reino de Dios es anunciado, y quienquiera se esfuerza a entrar en él.


Y Abraham le dice: A Moisés y a los profetas tienen; oigan a ellos.


Y comenzando desde Moisés, y de todos los profetas, les declaraba esto en todas las Escrituras que eran de él.


Y les dijo: Estas son las palabras que os hablé, estando aún con vosotros: que era necesario que se cumpliesen todas las cosas que están escritas de mí en la ley de Moisés, y en los profetas, y en los salmos.


Felipe halló a Natanael, y le dice: Hemos hallado a aquel de quien escribió Moisés en la ley, y los profetas: a Jesús, el hijo de José, de Nazaret.


A éste dan testimonio todos los profetas, de que todos los que en él creyeren, recibirán perdón de pecados por su Nombre.


Y después de la lectura de la ley y de los profetas, los príncipes de la sinagoga enviaron a ellos, diciendo: Varones hermanos, si hay en vosotros alguna palabra de exhortación para el pueblo, hablad.


Mas algunos de la secta de los fariseos, que habían creído, se levantaron, diciendo: Que es necesario circuncidarlos, y mandarles que guarden la ley de Moisés.


Entonces hubo un alboroto no pequeño acerca del Camino.


Mas endureciéndose algunos y no creyendo, maldiciendo el Camino delante de la multitud, apartándose Pablo de ellos separó a los discípulos, disputando cada día en la escuela de un cierto Tiranno.


Y él dijo: El Dios de nuestros padres te ha escogido para que conocieses su voluntad, y vieses a aquel Justo, y oyeses la voz de su boca.


Entonces Félix, oídas estas cosas, les puso dilación, diciendo: Al estar más informado de este camino, cuando descendiere el tribuno Lisias acabaré de conocer de vuestro negocio.


Porque hemos hallado que este hombre es pestilencial, y levantador de sediciones a todos los judíos por todo el mundo, y príncipe de la sediciosa secta de los nazarenos;


dando Pablo razón: Que ni contra la ley de los judíos, ni contra el Templo, ni contra César he pecado en nada.


Mas ayudado del auxilio de Dios, persevero hasta el día de hoy, dando testimonio a pequeños y a grandes, no diciendo nada fuera de las cosas que los profetas y Moisés dijeron que habían de venir:


¿Crees, rey Agripa, a los profetas? Yo sé que crees.


Mi vida, pues, desde mi juventud, la cual desde el principio fue en mi nación, en Jerusalén, todos los judíos la saben;


Y ahora, por la esperanza de la promesa hecha por Dios a nuestros padres, soy llamado en juicio;


Mas querríamos oír de ti lo que sientes; porque de esta secta notorio nos es que en todos lugares es contradicha.


Y habiéndoles señalado un día, vinieron a él muchos a la posada, a los cuales declaraba y testificaba el Reino de Dios, procurando persuadirles lo que es de Jesús, el Cristo, por la ley de Moisés y por los profetas, desde la mañana hasta la tarde.


El Dios de Abraham, y de Isaac, y de Jacob, el Dios de nuestros padres ha glorificado a su Hijo Jesús, al cual vosotros entregasteis, y negasteis delante de Pilato, juzgando él que había de ser suelto.


El Dios de nuestros padres levantó a Jesús, al cual vosotros matasteis colgándole en el madero.


Yo Soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, y Dios de Isaac, y Dios de Jacob. Mas Moisés, temeroso, no osaba mirar.


y demandó de él letras para Damasco a las sinagogas, para que si hallase algunos hombres o mujeres de este camino, los trajese presos a Jerusalén.


Porque testigo me es Dios, al cual sirvo en mi espíritu en el Evangelio de su Hijo, que sin cesar me acuerdo de vosotros siempre en mis oraciones,


Pero ahora, sin la ley, la justicia de Dios se ha manifestado, testificada por la ley y por los profetas;


Porque conviene que también haya entre vosotros herejías, para que los que son probados se manifiesten entre vosotros.


idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,


Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar tengo memoria de ti en mis oraciones noche y día;


El hombre hereje, después de una y otra corrección, deséchalo;


escudriñando cuándo y en qué punto de tiempo significaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos; el cual antes anunciaba las aflicciones que habían de venir al Cristo, y la gloria después de ellas.


Y yo me postré a sus pies para adorarle. Y él me dijo: Mira que no lo hagas; yo soy siervo contigo, y con tus hermanos que tienen el testimonio de Jesús; adora a Dios, porque el testimonio de Jesús es el espíritu de profecía.


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