Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Oseas 4:3 - Dios Habla Hoy Versión Española

3 Por eso el país está de luto, se quedan sin fuerzas los que viven en él, y mueren los animales salvajes y las aves y también los peces del mar.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

3 Por lo cual se enlutará la tierra, y se extenuará todo morador de ella, con las bestias del campo y las aves del cielo; y aun los peces del mar morirán.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

3 Por eso la tierra está de luto y todos desfallecen. Hasta los animales salvajes y las aves de los cielos y los peces del mar desaparecen.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Por eso, todo el país está de duelo y están deprimidos sus habitantes. Y desaparecen hasta los animales salvajes, las aves del cielo y los peces del mar.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

3 Por eso tendrá luto la tierra, Y todos los que la habitan desfallecerán, Juntamente con las bestias del campo° y las aves de los cielos,° Y hasta los peces del mar perecerán.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 Por eso la tierra está seca, y todos sus habitantes desfallecen con los animales del campo y las aves del cielo; y aun los peces del mar desaparecen.

Gade chapit la Kopi




Oseas 4:3
17 Referans Kwoze  

La tierra está de luto y triste, el Líbano se marchita avergonzado, el valle de Sarón se ha convertido en un desierto, y Basán y el monte Carmelo están pelados.


¿Hasta cuándo estará seca la tierra y marchita la hierba de los campos? Los animales y las aves se están muriendo por la maldad de los habitantes del país, que piensan que no ves lo que hacen.


El país está lleno de adúlteros, de gente que corre a hacer el mal, que usa su poder para cometer injusticias. Por eso el Señor maldijo la tierra, y la tierra se secó y los pastos del desierto se quemaron.


Miré y ya no había ningún hombre, y todas las aves se habían escapado.


“Llorad y gemid por las montañas, entonad un lamento por las praderas, porque están quemadas y ya nadie pasa por ellas; ya no se oye el mugir del ganado, y hasta las aves y las fieras salieron huyendo.


¿Y no los he de castigar por estas cosas? ¿No he de dar su merecido a un pueblo así? Yo, el Señor, lo afirmo.


Los peces del mar, las aves del cielo, las fieras salvajes y los reptiles temblarán delante de mí, lo mismo que todos los hombres de la tierra. Las montañas se derrumbarán, las rocas caerán y todas las murallas se vendrán abajo.


¡Cómo muge el ganado! En vano buscan pasto las vacas, y los rebaños de ovejas se están muriendo.


Cuando el Señor hace oir su voz de trueno desde el monte Sión, en Jerusalén, las tierras de pastos se marchitan y se reseca la cumbre del Carmelo.


Así dice el Señor, el Dios todopoderoso: “En todas las plazas habrá llanto, en todas las calles habrá gritos de dolor. Llamarán al duelo a los campesinos, y a los llorones profesionales, al llanto.


¿Y no habrá de temblar la tierra por todo esto? ¿No habrán de llorar todos sus habitantes? ¡La tierra subirá y bajará como suben y bajan las aguas del Nilo!


Amenaza al mar, y lo seca; hace que se sequen todos los ríos. Los campos de Basán y el monte Carmelo se marchitan, y se marchitan también las flores del Líbano.


Destruiré a los hombres y a los animales, destruiré las aves y los peces, pondré tropiezo a los malvados y eliminaré de la tierra al hombre.” Esto afirma el Señor:


El Señor todopoderoso afirma: ‘Yo envío esta maldición para que entre en la casa del que roba y en la casa del que jura en falso por mi nombre. Y la maldición permanecerá allí hasta que no queden vigas ni piedras.’ ”


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite