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Números 31:2 - Dios Habla Hoy Versión Española

2 “Véngate de los madianitas en nombre de los israelitas. Después de eso, morirás.”

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

2 Haz la venganza de los hijos de Israel contra los madianitas; después serás recogido a tu pueblo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 «En nombre del pueblo de Israel, toma venganza en contra de los madianitas por haber conducido a mi pueblo a la idolatría. Después morirás y te reunirás con tus antepasados».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Que los hijos de Israel tomen ahora desquite de los madianitas, y luego irás a reunirte con tu pueblo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 Toma venganza completa de los hijos de Israel contra los madianitas. Después serás reunido a tu pueblo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 'Toma venganza de los madianitas por lo que hicieron a los israelitas, y después te reunirás con tus antepasados'.

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Números 31:2
30 Referans Kwoze  

Por lo que a ti toca, morirás en paz cuando ya seas muy anciano, y así te reunirás con tus antepasados.


Ismael tenía ciento treinta y siete años cuando murió y fue a reunirse con sus antepasados.


y murió de muerte natural, cuando ya era muy anciano. Y fue a reunirse con sus antepasados.


Reuel, sacerdote de Madián, tenía siete hijas. Aquel día, ellas habían ido al pozo a sacar agua para llenar los bebederos y dar de beber a las ovejas de su padre,


Por eso, el Señor todopoderoso, el Poderoso de Israel, afirma: “¡Basta! Yo ajustaré las cuentas a mis enemigos. Me vengaré de ellos.


El Señor es Dios celoso y vengador: se venga de los que se le oponen y se enoja con sus enemigos.


“Aarón va a morir, y no entrará en el país que yo he dado a los israelitas, porque junto al manantial de Meribá desobedecisteis mis órdenes.


allí le quitarás a Aarón la ropa sacerdotal y se la pondrás a Eleazar. Aarón morirá allí.”


Cuando los israelitas se establecieron en Sitim, sus hombres empezaron a corromperse con las mujeres moabitas,


Pero un israelita llevó a su casa a una mujer madianita, a la vista de Moisés y de todos los israelitas reunidos, mientras ellos se encontraban llorando a la entrada de la tienda del encuentro.


Después que la hayas visto, morirás y te reunirás con tus antepasados, como tu hermano Aarón,


El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:


Moisés dijo entonces al pueblo: –Armaos algunos de vosotros para la guerra, y atacad a Madián para vengaros de ellos en nombre del Señor.


Porque serán días de castigo en los que se cumplirá cuanto dicen las Escrituras.


Ahora bien, lo cierto es que David sirvió a la gente de su tiempo según Dios se lo había ordenado, y después murió y se reunió con sus padres y su cuerpo se descompuso.


Queridos hermanos, no os toméis la justicia por vuestra mano, sino dejad que sea Dios quien castigue; porque el Señor dice en la Escritura: “A mí me corresponde hacer justicia; yo pagaré.”


porque está al servicio de Dios para tu bien. Pero si te portas mal, entonces sí debes tenerle miedo; porque no en vano la autoridad lleva la espada, ya que está al servicio de Dios para dar su merecido al que hace lo malo.


para el día en que me vengue y les dé su merecido, para cuando llegue el momento de su caída. Ya está cerca el día de su destrucción, ¡ya se acerca su hora!’


Así que, aunque yo voy a morir en este país y no cruzaré el Jordán, vosotros sí lo cruzaréis, y tomaréis posesión de esa buena tierra.


Que nadie abuse ni engañe en este asunto a su hermano, porque el Señor castiga duramente todas esas cosas, como ya os hemos advertido.


Sabemos que el Señor ha dicho: “A mí me corresponde hacer justicia; yo pagaré.” Y también ha dicho: “El Señor juzgará a su pueblo.”


¡Alégrate, cielo, por causa de esa ciudad! ¡Y alegraos vosotros, los que sois del pueblo santo, y los apóstoles y los profetas, porque Dios, al condenarla, os ha hecho justicia!”


porque juzga rectamente y con verdad; ha condenado a la gran prostituta que con su prostitución corrompía al mundo; ha vengado en ella la muerte de los siervos de Dios.”


Decían con fuerte voz: “Soberano santo y fiel, ¿cuándo juzgarás a los habitantes de la tierra y vengarás nuestra muerte?”


Y cuando la gente le vio, también cantó y alabó a su dios, diciendo: “Nuestro dios ha puesto en nuestras manos a Sansón, nuestro enemigo, que destruía nuestros campos y mataba a muchos de los nuestros.”


Murieron también todos los israelitas de la época de Josué, y por eso los que nacieron después no sabían nada del Señor ni de sus actos en favor de Israel.


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