15 “Todos los primogénitos de los israelitas o las primeras crías de los animales que me ofrecen, serán para ti. Pero en el caso de los primogénitos de los hombres y de las primeras crías de los animales impuros, pedirás un rescate a cambio.
15 Todo lo que abre matriz, de toda carne que ofrecerán a Jehová, así de hombres como de animales, será tuyo; pero harás que se redima el primogénito del hombre; también harás redimir el primogénito de animal inmundo.
15 »Todo primer nacido, sea humano o animal, que se ofrece al Señor, será tuyo; pero siempre tendrán que redimir a los primeros hijos varones y a las primeras crías de los animales ceremonialmente impuros.
15 Te pertenecerá el primogénito de cualquier ser viviente, sea de hombre o de animal, ofrecido a Yavé. Tú harás solamente el rescate del primogénito de hombre, así como del primerizo de un animal impuro.
15 Todo lo que abra matriz de toda carne que presenten a YHVH, tanto de hombres como de animales, será tuyo. Sin embargo, redimirás sin falta el primogénito del hombre, y también redimirás el primerizo del animal impuro.
15 Todos los primogénitos de hombres y animales que presenten a Yahveh serán tuyos; pero harás rescatar a los primogénitos de los hombres y a los primogénitos de los animales impuros.
También acordamos llevar a los almacenes del templo de nuestro Dios, como contribución para los sacerdotes, nuestra primera harina y los primeros frutos de cada árbol, y nuestro primer vino y nuestro primer aceite, y llevar a los levitas la décima parte de nuestras cosechas, ya que son ellos los que recogen la décima parte en todas nuestras fincas.
Cuando el faraón se puso terco en no dejarnos salir, el Señor hirió de muerte al primogénito de cada familia egipcia y a todas las primeras crías de sus animales; por eso ofrecemos al Señor todos los machos que nacen primero, y damos una ofrenda como rescate por nuestro primogénito.
En el caso de la primera cría de una asna, daréis un cordero o un cabrito en lugar del asno; y si no lo dais, le romperéis el cuello al asno. También daréis una ofrenda en lugar de cada primogénito vuestro. Y nadie vendrá a verme si no trae alguna cosa.
porque a mí me pertenece todo primogénito. Cuando hice morir a todos los primogénitos de los egipcios, reservé para mí los primogénitos de los israelitas y las primeras crías de sus animales. Por lo tanto, me pertenecen. Yo soy el Señor.”
Pero los primogénitos de los israelitas son más numerosos que los levitas; así que, para rescatar a esos doscientos setenta y tres primogénitos que hay de más,
“Todo primer macho que nazca de tus vacas o de tus ovejas deberás consagrarlo al Señor tu Dios. “No hagas trabajar al primer ternerito de tus vacas ni esquiles al primer corderito de tus ovejas.