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Lucas 22:29 - Dios Habla Hoy Versión Española

29 Por eso yo os asigno un reino, como mi Padre me lo asignó a mí,

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Biblia Reina Valera 1960

29 Yo, pues, os asigno un reino, como mi Padre me lo asignó a mí,

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Biblia Nueva Traducción Viviente

29 Así como mi Padre me concedió un reino, yo ahora les concedo el derecho

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Biblia Católica (Latinoamericana)

29 Por eso les doy autoridad como mi Padre me la dio a mí haciéndome rey.

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La Biblia Textual 3a Edicion

29 Yo pues os asigno° un reino, como mi Padre me lo asignó,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

29 por eso, del mismo modo que mi Padre dispuso a favor mío de un reino, yo también dispongo de él a favor vuestro,

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Lucas 22:29
14 Referans Kwoze  

Os aseguro que el amo le pondrá al cargo de todos sus bienes.


El señor le dijo: ‘Muy bien, eres un criado bueno y fiel. Y como has sido fiel en lo poco, yo te pondré al cargo de mucho más. Entra y alégrate conmigo.’


Y dirá el Rey a los de su derecha: ‘Venid vosotros, los que mi Padre ha bendecido: recibid el reino que se os ha preparado desde la creación del mundo.


Jesús se acercó a ellos y les dijo: –Dios me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra.


“Dichosos los perseguidos por hacer lo que es justo, porque suyo es el reino de los cielos.


“Dichosos los que reconocen su pobreza espiritual, porque suyo es el reino de los cielos.


“No tengáis miedo, pequeño rebaño, que el Padre, en su bondad, ha decidido daros el reino.


El rey le contestó: ‘Muy bien, eres un buen administrador. Y como has sido fiel en lo poco, te hago gobernador de diez ciudades.’


Los que se entrenan para competir en un deporte evitan todo lo que pueda dañarles. Y lo hacen por alcanzar como premio una corona de hojas de laurel, que en seguida se marchita. Nosotros, en cambio, luchamos por recibir un premio que no se marchita.


Tenemos una esperanza firme respecto de vosotros, porque nos consta que, así como tenéis parte en los sufrimientos, también tenéis parte en el consuelo que viene de Dios.


si sufrimos, tendremos parte en su reino; si le negamos, también él nos negará;


Queridos hermanos míos, oíd esto: Dios ha escogido a los pobres de este mundo para hacerlos ricos en fe y para que reciban como herencia el reino que él ha prometido a los que le aman.


Así, cuando aparezca el Pastor principal, recibiréis la corona de la gloria, una corona que jamás se marchitará.


La muralla de la ciudad tenía por cimientos doce piedras, en las que estaban escritos los nombres de los doce apóstoles del Cordero.


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