los cantos de fiesta y alegría, y los cantos de los novios, y se oirá decir: ‘Dad gracias al Señor todopoderoso, porque el Señor es bueno, porque su amor es eterno.’ Y traerán al templo ofrendas de gratitud. Sí, yo cambiaré la suerte de este país, para que vuelva a ser como al principio. Yo, el Señor, lo afirmo.”
y llevaréis de vuestras casas dos panes de la mejor harina cocidos con levadura, de unos cuatro kilos cada uno, como ofrenda especial de primeros frutos para el Señor.
Junto con los panes llevaréis siete corderos de un año, sin defecto, y un becerro y dos carneros, como holocausto en honor del Señor, ofrenda quemada de aroma agradable a él, además de vuestras ofrendas de cereal y de vino.
Quemad panes sin levadura en ofrenda de gratitud y anunciad por todas partes vuestras ofrendas voluntarias, ya que eso es lo que os encanta.” El Señor lo afirma.
También les contó esta parábola: “El reino de los cielos se puede comparar a la levadura que una mujer mezcla con tres medidas de harina para que toda la masa fermente.”