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Levítico 3:17 - Dios Habla Hoy Versión Española

17 “Esta es una ley permanente que pasará de padres a hijos, dondequiera que viváis: no comáis nada de grasa ni de sangre.”

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

17 Estatuto perpetuo será por vuestras edades, dondequiera que habitéis, que ninguna grosura ni ninguna sangre comeréis.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

17 »Nunca deberás comer grasa ni sangre. Esta es una ley perpetua para ti que debe cumplirse de generación en generación, dondequiera que vivas».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

17 Toda la grasa pertenece a Yavé. Este es un decreto perpetuo de generación en generación, dondequiera que vivan. No comerán grasa ni sangre.

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La Biblia Textual 3a Edicion

17 Es estatuto perpetuo por vuestras generaciones en todos vuestros asentamientos: no comeréis grasa ni sangre.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

17 Ésta es una ley perpetua para vuestras generaciones dondequiera que habitéis: no comeréis ni grasa ni sangre.'

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Levítico 3:17
42 Referans Kwoze  

Pero hay una cosa que no debéis comer: carne con sangre, porque en la sangre está la vida.


Además había una gran cantidad de holocaustos que ofrecer, y la grasa de los sacrificios de reconciliación, y las ofrendas de vino que se hacían junto con los holocaustos. De este modo se restableció el culto en el templo del Señor.


Además les dijo Esdras: “Id y comed de lo mejor, bebed vino dulce e invitad a quienes no tengan nada preparado, porque hoy es un día dedicado a nuestro Señor. No estéis tristes, porque la alegría del Señor es nuestro refugio.”


Aarón y sus hijos se encargarán de preparar las lámparas, para que ardan delante del Señor toda la noche en la tienda del encuentro con Dios, fuera del velo que está junto al arca del pacto. Esta es una ley permanente para los israelitas y sus descendientes.


y que Aarón y sus hijos los lleven puestos cuando entren en la tienda del encuentro, o cuando se acerquen al altar, mientras oficien como sacerdotes en el santuario, para que no cometan ninguna falta y mueran. Esta es una ley permanente para él y sus descendientes.


Por lo tanto, diles: ‘Así dice el Señor: Vosotros coméis carne con sangre, adoráis ídolos y cometéis asesinatos, ¿y creéis que vais a ser dueños del país?


“Los sacerdotes levitas descendientes de Sadoc que continuaron prestando servicio en mi templo cuando los israelitas se apartaron de mis caminos, sí podrán acercarse a mí para servirme. Ellos podrán presentarse ante mí para ofrecerme la grasa y la sangre de los sacrificios. Yo, el Señor, lo ordeno.


Vosotros profanáis mi templo dejando entrar en él a extranjeros, a gente que no lleva la marca de mi pacto ni en su mente ni en su cuerpo; lo profanáis ofreciéndome como alimento la grasa y la sangre de los sacrificios y violando mi pacto con todas esas acciones detestables.


El muslo, que es la contribución, y el pecho, que es la ofrenda especial, serán llevados ante el Señor y presentados como ofrenda especial, junto con las grasas que se ofrecen para ser quemadas. Esta parte será siempre tuya y de tus hijos, tal como el Señor lo ha ordenado.


“Cuando tú o tus hijos tengáis que entrar en la tienda del encuentro, no beberéis vino ni licor, no sea que muráis. Es una ley permanente, que pasará de padres a hijos,


“Esta será una ley permanente para vosotros: el día diez del mes séptimo lo dedicaréis al ayuno y suspenderéis todas vuestras labores, lo mismo los israelitas que los extranjeros que vivan entre vosotros,


“Esta será una ley permanente para vosotros: una vez al año se celebrará el rito para obtener el perdón de los pecados que hayan cometido los israelitas.” Y se hizo tal como el Señor se lo ordenó a Moisés.


Y nunca más volverán a presentar sus sacrificios a esos demonios a los que han adorado y por los que se han corrompido. Esta será una ley permanente para vosotros, que pasará de padres a hijos.


“No comáis nada que tenga sangre. “No practiquéis la adivinación ni pretendáis predecir el futuro.


Hasta el día en que llevéis vuestra ofrenda al Señor, no comeréis pan, ni trigo tostado o fresco. Esta es una ley permanente, que pasará de padres a hijos y dondequiera que viváis.


“Ese mismo día celebraréis una reunión santa, y no haréis ninguna clase de trabajo duro. Esta es una ley permanente, que pasará de padres a hijos y dondequiera que viváis.


Aarón se encargará de prepararlas, para que durante toda la noche ardan sin cesar delante del Señor en la tienda del encuentro, fuera del velo que está junto al arca del pacto. Esta es una ley permanente, que pasará de padres a hijos.


Es la parte que les corresponderá siempre a Aarón y a sus descendientes, los cuales comerán ese pan en un lugar santo, porque de las ofrendas que se queman en honor del Señor, esta es una de las más sagradas.”


Luego el sacerdote quemará todo esto sobre el altar, como ofrenda de alimento quemada, de aroma agradable. Toda la grasa es para el Señor.


El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:


Uno de ellos tomará un puñado de la harina ofrendada y de su aceite, junto con todo el incienso que va con la ofrenda, y los hará arder en el altar como ofrenda quemada de memorial, de aroma agradable al Señor.


Para siempre en el futuro, todos los varones descendientes de Aarón podrán comer la parte que les corresponde de las ofrendas quemadas al Señor. Cualquier cosa que toque estas ofrendas quedará consagrada.”


Así la preparará el sacerdote principal descendiente de Aarón que sea consagrado en su lugar; le corresponde siempre al Señor, y deberá ser quemada completamente.


“Di esto a los israelitas: No comeréis ninguna grasa de toro, de cordero o de cabra.


pues de los sacrificios de reconciliación que los israelitas me ofrecen he tomado el pecho como ofrenda especial y el muslo como contribución, y se los he dado al sacerdote Aarón y a sus descendientes como la parte que siempre les corresponderá de las ofrendas de los israelitas.”


El Señor ordenó que los israelitas se las dieran, a partir del día en que los consagró, como una obligación permanente que pasaría de padres a hijos.


Esta es una ley permanente. El que rocía a otro con el agua de purificación, deberá lavar su ropa. El que toque el agua de purificación, quedará impuro hasta la tarde.


Luego Jesús dijo a sus discípulos: –El que quiera ser mi discípulo, olvídese de sí mismo, cargue con su cruz y sígame.


porque esto es mi sangre, con la que se confirma el pacto, la cual es derramada en favor de muchos para perdón de sus pecados.


que no comáis carne de animales ofrecidos en sacrificio a los ídolos, que no comáis sangre ni tampoco carne de animales ahogados, y que evitéis toda inmoralidad sexual. Si os guardáis de estas cosas, actuaréis correctamente. Que os vaya bien.”


En su gran amor, Dios nos ha liberado por la sangre que su Hijo derramó, y ha perdonado nuestros pecados.


Esto lo hizo para santificarla, purificándola con el baño del agua acompañado de la palabra


Pero la sangre no la comeréis, sino que la derramaréis en la tierra como agua.


Pero de ninguna manera comeréis la sangre, porque la sangre es la vida y no debéis comer la vida junto con la carne.


Lo que debéis hacer es derramarla en la tierra como agua.


Pero no comerás su sangre, sino que la derramarás en la tierra como agua.


de sus ganados tuvieron leche y cuajada, y comieron lo mejor de los corderos, de los carneros de Basán y de los machos cabríos; comieron el mejor grano de trigo y bebieron el vino, la sangre de las uvas.


Pues todo lo que Dios ha creado es bueno, y nada debe ser rechazado si lo comemos dando gracias a Dios,


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