Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Levítico 19:3 - Dios Habla Hoy Versión Española

3 “Respete cada uno a su padre y a su madre. “Respetad también mis sábados. Yo soy el Señor vuestro Dios.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

3 Cada uno temerá a su madre y a su padre, y mis días de reposo guardaréis. Yo Jehová vuestro Dios.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

3 »Cada uno de ustedes tenga gran respeto por su madre y su padre, y siempre guarde mis días de descanso. Yo soy el Señor su Dios.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Todos ustedes respetarán a su padre y a su madre y guardarán mis sábados. ¡Yo soy Yavé, su Dios!

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

3 Cada uno temerá a su madre y a su padre,° y guardaréis° mis días de reposo.° Yo, YHVH vuestro Dios.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 Cada uno de vosotros respetará a su padre y a su madre; y guardaréis mis sábados. Yo, Yahveh, vuestro Dios.

Gade chapit la Kopi




Levítico 19:3
31 Referans Kwoze  

José quitó a los niños de las rodillas de su padre y se inclinó hasta tocar el suelo con la frente.


Les enseñaste también a consagrarte el sábado, y por medio de tu siervo Moisés les diste mandamientos y enseñanzas verdaderas, leyes y enseñanzas.


Tened en cuenta que yo, el Señor, os he dado un día de reposo; por eso, el sexto día os doy comida para dos días. Así que el séptimo día debe quedarse cada uno en su casa y no salir de ella.


“Honra a tu padre y a tu madre, para que vivas una larga vida en la tierra que te da el Señor tu Dios.


“Acuérdate del sábado, para consagrárselo al Señor.


“El que hiera a su padre o a su madre, será condenado a muerte.


“El que insulte a su padre o a su madre, será condenado a muerte.


Hijo mío, escucha la instrucción de tu padre y no abandones la enseñanza de tu madre,


Atiende a tu padre, que te engendró; no desprecies a tu madre cuando sea anciana.


Hay quienes maldicen a su padre y no bendicen a su madre.


El que mira a su padre con desprecio y se burla de su madre anciana, merece que los cuervos le saquen los ojos y que las águilas lo devoren.


“Respeta el sábado; no te dediques a tus negocios en mi día santo. Considera este día como día de alegría, como día santo del Señor y digno de honor; hónralo no dedicándote a tus asuntos ni buscando tus intereses ni haciendo negocios.


También les di a conocer mis sábados, que debían ser una señal entre ellos y yo, y un recuerdo de que yo, el Señor, los había consagrado para mí.


porque yo soy el Señor vuestro Dios. Vosotros debéis purificaros completamente, y ser santos porque yo soy santo. No os hagáis impuros con ningún animal que se arrastre por la tierra.


y al quinto año ya podréis comer su fruto. Así el árbol os dará más. Yo soy el Señor vuestro Dios.


“Respetad mis sábados. Guardad reverencia por mi santuario. Yo soy el Señor.


“No recurráis a espíritus y adivinos; no os hagáis impuros consultándolos. Yo soy el Señor vuestro Dios.


Tratadlo como a uno de vosotros; amadlo, pues es como vosotros. Además, también vosotros fuisteis extranjeros en Egipto. Yo soy el Señor vuestro Dios.


“Trabajarás durante seis días, pero el día séptimo no harás trabajo alguno; será un día especial de reposo y habrá una reunión santa. Dondequiera que vivas, ese día será de reposo en honor del Señor.


Respetad mis sábados; tened reverencia por mi santuario. Yo soy el Señor.


El Señor todopoderoso dice a los sacerdotes: “Los hijos honran a sus padres y los criados respetan a sus amos. Pues si yo soy vuestro Padre, ¿por qué no me honráis? Si soy vuestro Amo, ¿por qué no me respetáis? Vosotros me despreciáis, y todavía decís: ‘¿En qué te hemos despreciado?’


‘Maldito el que trate con desprecio a su padre o a su madre.’ Y todo el pueblo dirá: ‘Amén.’


‘Honra a tu padre y a tu madre, tal como el Señor tu Dios te lo ha ordenado, para que vivas una larga vida y te vaya bien en la tierra que te da el Señor tu Dios.


Además, nuestros padres aquí en la tierra nos corregían cuando éramos niños, y los respetábamos. ¿Por qué no hemos de someternos, con mayor razón, a nuestro Padre celestial, para obtener la vida?


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite