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Juan 3:33 - Dios Habla Hoy Versión Española

33 Pero el que lo cree, confirma con ello que Dios dice la verdad;

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

33 El que recibe su testimonio, este atestigua que Dios es veraz.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

33 Todo el que acepta su testimonio puede confirmar que Dios es veraz.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

33 Pero aceptar su testimonio es como reconocer que Dios es veraz.

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La Biblia Textual 3a Edicion

33 El que recibe su testimonio ha atestiguado que Dios es veraz.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

33 El que acepta su testimonio, certifica que Dios es veraz.

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Juan 3:33
17 Referans Kwoze  

No trabajéis por la comida que se acaba, sino por la comida que permanece y os da vida eterna. Esta es la comida que os dará el Hijo del hombre, porque Dios, el Padre, ha puesto su sello en él.


Tengo mucho que decir y juzgar de vosotros; pero el que me ha enviado dice la verdad, y lo que yo digo al mundo es lo mismo que le he oído decir a él.


Así que, cuando yo termine este asunto y les haya entregado la colecta, saldré para España, y de paso os visitaré.


Y después fue Abraham circuncidado, como señal o sello de que Dios ya le había aceptado como justo por causa de su fe. De este modo, Abraham ha venido a ser también el padre de todos los que tienen fe, aunque no hayan sido circuncidados; y así Dios los acepta igualmente a ellos como justos.


Quizás otros no me reconozcan como apóstol, pero vosotros sí tenéis que reconocerme como tal, porque el hecho de que seáis creyentes en el Señor prueba que en verdad lo soy.


Dios es testigo de que no os decimos “sí” y “no” al mismo tiempo.


Nos ha marcado con su sello y ha puesto en nuestro corazón el Espíritu Santo como garantía de lo que vamos a recibir.


Y también vosotros, cuando oísteis el mensaje de la verdad, la buena noticia de vuestra salvación, y creísteis en Cristo, fuisteis unidos a él y sellados como propiedad de Dios por medio del Espíritu Santo que él había prometido.


No hagáis entristecer al Espíritu Santo de Dios, con el que habéis sido sellados para distinguiros como propiedad de Dios el día de vuestra liberación definitiva.


Pero Dios ha puesto una base firme, en la cual está escrito: “El Señor conoce a los que le pertenecen”, y también: “Que se aparte de la maldad todo el que invoca el nombre del Señor”.


Pues bien, Dios quiso mostrar claramente a quienes habían de recibir la herencia que él les prometía, que estaba dispuesto a cumplir la promesa sin cambiar nada de ella. Por eso garantizó su promesa mediante el juramento.


Si decimos que no hemos cometido pecado, dejamos a Dios por mentiroso y no hemos aceptado verdaderamente su palabra.


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