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Juan 1:47 - Dios Habla Hoy Versión Española

47 Cuando Jesús vio acercarse a Natanael, dijo: –Aquí viene un verdadero israelita, en quien no hay engaño.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

47 Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

47 Mientras ellos se acercaban, Jesús dijo: —Aquí viene un verdadero hijo de Israel, un hombre totalmente íntegro.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

47 Cuando Jesús vio venir a Natanael, dijo de él: 'Ahí viene un verdadero israelita: éste no sabría engañar.

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La Biblia Textual 3a Edicion

47 Jesús ve° a Natanael que viene, y dice acerca de él: ¡He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

47 Jesús vio a Natanael, que se le acercaba, y dice de él: 'Éste es un auténtico israelita, en quien no hay doblez'.

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Juan 1:47
13 Referans Kwoze  

No necesitaba ser informado acerca de nadie, pues él mismo conocía el corazón de cada uno.


Jesús le dijo: –Ve a llamar a tu marido y vuelve acá.


Jesús dijo a los judíos que habían creído en él: –Si os mantenéis fieles a mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;


Dijeron ellos: –¡Nuestro padre es Abraham! Pero Jesús les respondió: –Si de veras fuerais hijos de Abraham, haríais lo que él hizo.


Son descendientes de Israel y Dios los adoptó como hijos. Dios estuvo entre ellos con su presencia gloriosa y les dio los pactos, la ley de Moisés, el culto y las promesas.


Pero no es que las promesas de Dios a Israel hayan quedado sin cumplir. Lo que sucede es que no todos los descendientes de Israel son verdadero pueblo de Israel


Porque los verdaderos circuncidados somos nosotros, los que adoramos a Dios movidos por su Espíritu, los que nos gloriamos de ser de Cristo Jesús y no ponemos nuestra confianza en cosas externas.


Por lo tanto, abandonad toda clase de maldad, todo engaño, hipocresía y envidia, y toda murmuración.


Cristo no cometió ningún pecado ni engañó jamás a nadie.


No se encontró ninguna mentira en sus labios, pues son intachables.


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