Proverbios 21:1 - Biblia Castilian 2003

¹ Arroyo es el corazón del rey en manos de Yahveh: que él dirige adonde quiere.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹ Como los repartimientos de las aguas, Así está el corazón del rey en la mano de Jehová; A todo lo que quiere lo inclina.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹ El corazón del rey es como un arroyo dirigido por el Señor, quien lo guía por donde él quiere.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹ Los pensamientos del rey, igual que el agua, corren por donde Yavé los dirige.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹ Como los repartimientos de las aguas, Así el corazón del rey está en la mano de YHVH, A todo lo que quiere lo inclina.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹ Arroyo es el corazón del rey en manos de Yahveh: que él dirige adonde quiere.

Proverbios 21:1 Referans Kwoze

2 Reyes 19:33

Por el camino que trajo ha de volver. En esta ciudad no entrará - oráculo de Yahveh -.

Esdras 1:1

El a o primero de Ciro, rey de Persia, en cumplimiento del oráculo de Yahveh pronunciado por Jerem as, excitó Yahveh el esp ritu de Ciro, rey de Persia, quien hizo publicar de viva voz y también por escrito, por todo su reino, este decreto:

Esdras 1:2

'As habla Ciro, rey de Persia: Yahveh, el Dios del cielo, me ha dado todos los reinos de la tierra y me ha encargado que le edifique un templo en Jerusalén de Judá.

Esdras 6:22

Celebraron con gran júbilo la fiesta de los Ázimos durante siete d as, porque Yahveh les hab a colmado de gozo, ya que hab a transformado en su favor el corazón del rey de Asiria hasta el punto de ayudarles para la obra del templo de Dios, el Dios de Israel.

Nehemías 1:11

Ahora, oh Se or, esté atento tu o do a la oración de tu siervo, a la oración de tus siervos, que se complacen en reverenciar tu nombre. Concede a tu siervo que hoy tenga éxito y que halle clemencia ante ese hombre'. Yo era entonces copero del rey.

Nehemías 2:4

D jome el rey: '¿Qué pretendes, pues?'. Encomendándome al Dios del cielo,

Nehemías 2:8

y asimismo otra carta para Asaf, guarda del bosque real, a fin de que me proporcione maderas con que construir las puertas de la ciudadela que está junto al templo, las murallas de la ciudad y la casa en la que yo voy a habitar'. Y me lo concedió el rey, pues la mano bondadosa de Dios estaba conmigo.

Ester 2:17

El rey amó a Ester más que a todas las otras mujeres, y ella halló más gracia y favor ante él que todas las demás doncellas. Puso la corona real sobre su cabeza y la proclamó reina en lugar de Vast.

Salmos 105:25

Les trastornó el corazón para que odiasen a su pueblo y fueran alevosos con sus siervos.

Salmos 106:46

y movió a misericordia a sus conquistadores.

Salmos 114:3

Vio el mar y se apartó, el Jordán se tornó atrás,

Salmos 114:5

¿Qué tienes, mar, para apartarte y tú, Jordán, para volverte atrás,

Salmos 74:15

Cavaste manantiales y torrentes y secaste corrientes caudalosas.

Salmos 93:4

Pero más que el bramido de las aguas caudalosas, más augusto que el mar en sus rompientes, es augusto en las alturas el Se or.

Éxodo 7:3

Pero yo endureceré el corazón del Faraón, y multiplicaré mis se ales y mis prodigios en el pa s de Egipto.

Proverbios 16:1

El hombre propone en su corazón, pero es Yahveh quien da la respuesta.

Proverbios 16:9

El corazón del hombre traza su camino, pero es Yahveh quien dirige sus pasos.

Proverbios 20:24

Yahveh dirige los pasos del hombre; ¿cómo sabrá el hombre su propio camino?

Isaías 43:19

Aqu estoy haciendo una cosa nueva, ahora mismo despunta, ¿no la conocéis? Yo abriré en el desierto un camino, en el páramo r os.

Isaías 44:27

quien dice al abismo: 'Sécate', pues tus r os los agoto yo;

Jeremías 39:12

'Atiéndelo, mira por él, no le hagas ningún da o, antes al contrario: pórtate con él como él te pida'.

Hechos 7:10

y lo libró de todas sus tribulaciones, dándole gracia y sabidur a ante el Faraón rey de Egipto, que le nombró superintendente sobre Egipto y sobre toda su casa.

Apocalipsis 16:12

El sexto derramó su copa sobre el gran r o Éufrates. Su agua se secó, de modo que quedó expedito el camino de los reyes que vienen de oriente.

Apocalipsis 16:4

El tercero derramó su copa sobre los r os y sobre las fuentes de las aguas; y se convirtieron en sangre.