Proverbios 13:25 - Biblia Castilian 2003

²⁵ El justo come hasta saciar su apetito, el vientre de los malvados conoce el hambre.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁵ El justo come hasta saciar su alma; Mas el vientre de los impíos tendrá necesidad.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁵ Los justos comen hasta quedar bien satisfechos, pero el estómago de los perversos quedará vacío.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁵ El justo come y calma su apetito, el estómago de los malos grita de hambre.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁵ El justo come y sacia su apetito, Pero el vientre de los impíos padece escasez.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁵ El justo come hasta saciar su apetito, el vientre de los malvados conoce el hambre.

Proverbios 13:25 Referans Kwoze

Salmos 103:5

él satura de bienes tu existencia, y tú te rejuveneces como el águila.

Salmos 132:15

Bendeciré sus provisiones y saciaré de pan a sus hambrientos;

Salmos 34:10

Adorad al Se or, sus elegidos, Yod que de nada carece el que le teme.

Salmos 37:16

Vale más la migaja de los justos Tet que las riquezas del imp o.

Salmos 37:3

Conf a en el Se or y obra bien: Bet morarás en el pa s y de tu fidelidad tendrás contento.

Proverbios 10:3

Yahveh no permite el hambre del justo, pero rechaza la codicia de los malvados.

Proverbios 13:18

Miseria y oprobio a quien rechaza la instrucción; honor a quien admite la reprensión.

Proverbios 24:34

y te llega la miseria como un salteador, la indigencia como un hombre armado'.

Proverbios 6:11

y te llega la miseria como un salteador, la indigencia como un hombre armado.

Lucas 15:14

Después de haberlo malgastado todo, sobrevino un hambre muy grande por toda aquella región y él comenzó a sufrir privaciones.

Deuteronomio 28:48

habrás de servir en hambre y en sed, en desnudez y en privación, al enemigo que Yahveh mandará contra ti y pondrá sobre tu cuello un yugo de hierro, hasta que te extermine.

Deuteronomio 32:24

Cuando estén extenuados por el hambre, devorados por la fiebre y por la pestilencia mort fera, mandaré contra ellos dientes de fieras y veneno de reptantes por el polvo.

2 Tesalonicenses 3:10

Ya cuando estábamos entre vosotros os dimos esta norma: el que no quiere trabajar, que no coma.

1 Timoteo 4:8

Porque el entrenamiento corporal para poco sirve; en cambio, la religión para todo sirve, ya que trae consigo promesa de vida: de la presente y de la futura.

Hebreos 13:5

No os dejéis arrastrar por la codicia y contentaos con lo que tenéis. Pues él ha dicho: No te dejaré ni te abandonaré.