Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Marcos 11:25 - Biblia Castilian 2003

25-26 Y cuando estéis orando, si tenéis algo contra alguien, perdonadlo, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone vuestros pecados'.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

25 Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

25 Cuando estén orando, primero perdonen a todo aquel contra quien guarden rencor, para que su Padre que está en el cielo también les perdone a ustedes sus pecados.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

25 Y cuando se pongan de pie para orar, si tienen algo contra alguien, perdónenlo,

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

25 Y cuando estéis en pie orando, si tenéis algo contra alguien, perdonad, para que también vuestro Padre celestial os perdone vuestras ofensas.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

25-26 Y cuando estéis orando, si tenéis algo contra alguien, perdonadlo, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone vuestros pecados'.

Gade chapit la Kopi




Marcos 11:25
13 Referans Kwoze  

Después me mostró al sumo sacerdote Josué, que estaba delante del ángel de Yahveh, mientras que Satán se hallaba a su derecha para acusarlo.


Por tanto, si al ir a presentar tu ofrenda ante el altar recuerdas all que tu hermano tiene algo contra ti,


y perdónanos nuestras deudas, como nosotros hemos perdonado a nuestros deudores;


Y cuando hagáis vuestra oración, no seáis como los hipócritas, que gustan de orar erguidos en las sinagogas y en las esquinas de las plazas, para exhibirse ante la gente. Os lo aseguro: ya están pagados.


El fariseo, erguido, oraba as en su interior: '¡Oh Dios! Gracias te doy, porque no soy como los demás hombres: ladrones, injustos, adúlteros; ni tampoco como ese publicano.


En cambio, el publicano se quedó a distancia y ni siquiera se atrev a a levantar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: '¡Oh Dios! Ten misericordia de m, que soy pecador'.


No juzguéis, y no seréis juzgados. No condenéis, y no seréis condenados. Perdonad y seréis perdonados.


Sed, por el contrario, amables y compasivos unos con otros y perdonaos mutuamente, como Dios os perdonó en Cristo.


soportándoos mutuamente, y perdonándoos, si uno tiene alguna queja contra otro: como el mismo Se or os perdonó, as también vosotros.


Tendrá un juicio sin misericordia quien no tuvo misericordia. La misericordia prevalece sobre el juicio.


Éstos son los dos olivos y los dos candelabros que están puestos ante el Se or de la tierra.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite