Juan 5:38 - Biblia Castilian 2003

³⁸ ni tenéis su palabra que permanezca en vosotros, porque no creéis a aquel a quien Él envió.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³⁸ ni tenéis su palabra morando en vosotros; porque a quien él envió, vosotros no creéis.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁸ y no tienen su mensaje en el corazón, porque no creen en mí, que soy a quien el Padre les ha enviado.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁸ y tampoco tienen su palabra, pues no creen al que él ha enviado.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁸ ni tenéis su palabra permaneciendo en vosotros, porque a quien Él envió, a Éste vosotros no creéis.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁸ ni tenéis su palabra que permanezca en vosotros, porque no creéis a aquel a quien Él envió.

Juan 5:38 Referans Kwoze

Salmos 119:11

en mi interior escondo tus palabras, a fin de no pecar en tu presencia.

Isaías 26:10

Aunque se trate con clemencia al imp o, no aprende la justicia; en pa s de rectitud obra el mal, no ve la majestad de Yahveh.

Isaías 49:7

(7a) As dice Yahveh, redentor de Israel, su Santo, al despreciado en el alma, al aborrecido de las gentes, al siervo de los tiranos:

Juan 1:11

Ella vino a los suyos, y los suyos no la recibieron.

Juan 15:7

Si permanecéis en m y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que queráis, y os será concedido.

Juan 8:37

Ya sé que sois descendientes de Abrahán, pero pretendéis matarme, porque mi palabra no cala en vosotros.

Colosenses 3:16

La palabra de Cristo habite entre vosotros en toda su riqueza: ense aos y amonestaos mutuamente con toda sabidur a; cantad en vuestros corazones a Dios, con gratitud, salmos, himnos y cánticos espirituales.

Josué 1:8

Que el libro de esta ley no se aparte de tu boca; medita en él d a y noche para que procures actuar conforme a todo lo que en él está escrito, y as prosperarás y tendrás éxito en tus empresas.

1 Juan 2:14

Os escribo, hijos, porque habéis conocido al Padre. Os escribo, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio. Os escribo, jóvenes, porque sois fuertes, la palabra de Dios permanece en vosotros y habéis vencido al maligno.