Job 26:11 - Biblia Castilian 2003

¹¹ Las columnas de los cielos se tambalean y se llenan de pavor a su amenaza.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹¹ Las columnas del cielo tiemblan, Y se espantan a su reprensión.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹¹ Los cimientos del cielo tiemblan; se estremecen ante su reprensión.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹¹ Las columnas del cielo se tambalean y se llenan de miedo cuando amenaza.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹¹ Los pilares de los cielos se estremecen, Y quedan atónitos ante su reprensión.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹¹ Las columnas de los cielos se tambalean y se llenan de pavor a su amenaza.

Job 26:11 Referans Kwoze

2 Samuel 22:8

La tierra treme toda y se perturba, las bases de los montes se estremecen y palpitan, a causa de su ira.

Job 15:15

Si a sus mismos santos no se conf a, ni los cielos son puros a sus ojos,

Job 26:10

Él trazó un l mite sobre las aguas en los confines de la luz y las tinieblas.

Job 26:12

Con su fuerza domó el mar, con su inteligencia dominó a Ráhab.

Salmos 18:7

En mi aprieto yo clamo al Se or, a mi Dios elevo el grito, y él escucha mi voz desde su templo, mi clamor alcanza a sus o dos.

Nahum 1:5

Tiemblan los montes ante Él, He se estremecen las colinas. Ante Él trepida la tierra, el orbe y cuantos lo habitan.

Nahum 1:6

¿Quién resistirá ante su cólera? Zain ¿Quién soportará el ardor de su ira? Su furor se propaga como el fuego, Het ante Él las rocas se hienden.

Hageo 2:21

'D a Zorobabel, gobernador de Judá, lo siguiente: conmoveré el cielo y la tierra;

2 Pedro 3:10

Pero el d a del Se or vendrá como un ladrón. En él desaparecerán los cielos con formidable estruendo, los elementos se disolverán abrasados por el fuego y quedará al descubierto la tierra con todas las obras que hay en ella.

Apocalipsis 20:11

Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él. Huyeron de su presencia la tierra y el cielo, y no se les volvió a ver en ningún lugar.

1 Samuel 2:8

Él levanta al débil del polvo, y del estercolero saca al indigente, para hacerlo sentar entre los nobles, y para asignarle un trono de honor. Porque de Yahveh son las columnas de tierra, y asentó sobre ellas el orbe.