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Jeremías 51:5 - Biblia Castilian 2003

5 (5b) porque su pa s está lleno de culpa ante el Santo de Israel. (5a) Pues Israel y Judá no están viudas de su Dios, Yahveh Sebaot'.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

5 Porque Israel y Judá no han enviudado de su Dios, Jehová de los ejércitos, aunque su tierra fue llena de pecado contra el Santo de Israel.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

5 Pues el Señor de los Ejércitos Celestiales no ha abandonado a Israel ni a Judá. Todavía es su Dios, aunque su tierra se llenó de pecado contra el Santo de Israel».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

5 porque Israel no es viuda de su Dios, Yavé de los Ejércitos, aunque su país estaba lleno de pecados contra el Santo de Israel.

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La Biblia Textual 3a Edicion

5 Porque Israel y Judá no están viudas de su Dios, De YHVH Sebaot, Aunque su tierra esté llena de pecados Contra el Santo de Israel.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 porque su país está lleno de culpa ante el Santo de Israel. Pues Israel y Judá no están viudas de su Dios, Yahveh Sebaot'.

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Jeremías 51:5
37 Referans Kwoze  

Habitaré en medio de los israelitas y no abandonaré a mi pueblo Israel'.


Además, Manasés derramó much sima sangre inocente, hasta inundar Jerusalén de un extremo a otro, aparte del pecado de haber inducido a Judá a que hiciera lo que es malo a los ojos de Yahveh.


Esclavos fuimos. Pero nuestro Dios no nos abandonó en nuestra esclavitud, sino que inclinó hacia nosotros la benevolencia de los reyes de Persia y nos reanimó para levantar el templo de nuestro Dios, reparar sus ruinas y construirnos una muralla de defensa en Judá y en Jerusalén.


El Se or no deja solo a su pueblo ni abandona su heredad.


Recuerda estas cosas, Jacob, y tú, Israel, que eres mi siervo: yo te formé, tú eres mi siervo, Israel, jamás te olvidaré.


Pues yo, Yahveh, soy tu Dios, que agita el mar y braman sus olas; Yahveh Sebaot es su nombre.


Los llamarán 'Pueblo santo', 'Redimidos de Yahveh'. A ti te llamarán 'Buscada', 'Ciudad no abandonada''.


¿Has rechazado del todo a Judá, o tu alma está cansada de Sión? ¿Por qué nos has herido sin que tengamos cura? Esperábamos la paz, pero no ha habido bien alguno; el tiempo de la sanación, y se presenta el terror.


¿Por qué eres como hombre azorado, como guerrero incapaz de salvarse? Tú, Yahveh, estás en medio de nosotros y sobre nosotros se invoca su nombre, ¡No nos abandones!


Por eso quiero pagar su iniquidad y su pecado con el doble, porque han profanado mi pa s con los cadáveres de sus dolos y han llenado mi heredad con sus abominaciones.


Porque me han abandonado, han enajenado este lugar, han incensado en él a otros dioses que no conocieron ni ellos ni sus padres ni los reyes de Judá, han llenado este lugar de sangre inocente


Por eso, as dice Yahveh Sebaot sobre los profetas: 'Mirad: voy a darles de comer ajenjo, y voy a darles de beber agua envenenada, porque de los profetas de Jerusalén ha salido la corrupción para todo el pa s'.


As dice Yahveh: 'Si se midieran los cielos allá arriba y se sondearan los cimientos de la tierra aqu abajo, también yo rechazar a a toda la estirpe de Israel por todo lo que han hecho' - oráculo de Yahveh -.


No temas, siervo m o Jacob - oráculo de Yahveh -, pues contigo estoy yo, porque haré exterminio de todas las naciones adonde te dispersé. Sólo a ti no exterminaré, aunque te castigaré según tu merecido, pues impune del todo no te dejaré.


En aquellos d as y en aquel tiempo - oráculo de Yahveh -, se buscará la culpa de Israel y no la habrá, y los pecados de Judá y no se hallarán, porque perdonaré al resto que yo deje.


No es como la de éstos la porción de Jacob, porque él es quien formó el universo, y su tribu hereditaria es Israel. Yahveh Sebaot es su nombre.


Me dijo: '¡Ya ves, hijo de hombre! ¿Le basta, acaso, a la casa de Israel cometer las abominaciones que cometen aqu ? Al contrario, han llenado el pa s de violencia y continúan irritándome. ¡M ralos llevándose el ramo a las narices!


Me dijo: 'La iniquidad de la casa de Israel y de Judá es grande, muy grande; el pa s está lleno de sangre y la ciudad llena de injusticia, porque dice: 'Yahveh ha abandonado el pa s, Yahveh no ve nada'.


Será el número de los hijos de Israel como la arena del mar que no puede medirse ni contarse. Y en vez de llamarlos: 'No - mi - pueblo', se les llamará: 'Hijos - del - Dios - vivo'.


Llamad a vuestro hermano: 'Mi - pueblo' y a vuestra hermana: 'Amada'.


Escuchad la palabra de Yahveh, hijos de Israel, porque Yahveh viene a querellarse contra los habitantes del pa s, porque no hay en ellos ni fidelidad ni amor, ni conocimiento de Dios.


Perjurio, mentira, asesinato, robo y adulterio se propagan; homicidios suceden a homicidios.


¿Qué Dios hay como tú, que perdona el pecado, que pasa por alto la rebeld a del resto de su heredad? No persiste por siempre en su ira, porque se complace en la misericordia.


Mostrarás tu fidelidad a Jacob, tu misericordia a Abrahán, como juraste a nuestros padres desde los d as de anta o.


Aquel d a haré de los jefes de Judá como brasero encendido en el bosque y como antorcha encendida entre gavillas: devorarán a derecha y a izquierda a todos los pueblos de alrededor, pero Jerusalén permanecerá donde se encuentra: en Jerusalén.


Aquel d a protegerá Yahveh a los habitantes de Jerusalén: el más débil de entre ellos será aquel d a como David; y la casa de David será como Dios, como un ángel de Yahveh ante ellos.


Pues as dice Yahveh Sebaot - cuya gloria me ha enviado - a las naciones que os despojan: quien os toca a vosotros me toca la ni a de los ojos.


Y Yahveh por amor de su gran nombre, no abandonará a su pueblo pues ha querido hacer de vosotros su pueblo.


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