Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt
- Piblisite -





Jeremías 42:14 - Biblia Castilian 2003

14 diciendo: ¡No!, sino que nos iremos al pa s de Egipto, donde no veremos más guerra, ni oiremos la voz de la trompeta, ni tendremos hambre de pan y all nos quedaremos,

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

14 diciendo: No, sino que entraremos en la tierra de Egipto, en la cual no veremos guerra, ni oiremos sonido de trompeta, ni padeceremos hambre, y allá moraremos;

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

14 sino que iremos a Egipto donde estaremos libres de guerra, de llamados a las armas y de hambre”,

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

14 y sostienen, por el contrario: 'No, que es a Egipto adonde queremos ir, pues allí no veremos más la guerra, ni oiremos el toque del clarín, ni sufriremos de falta de paz; es allí donde queremos morar',

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

14 diciendo: No, sino que entraremos en la tierra de Egipto, donde no veremos guerra, ni oiremos sonido de trompeta, ni padeceremos hambre, y allá moraremos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 diciendo: ¡No!, sino que nos iremos al país de Egipto, donde no veremos más guerra, ni oiremos la voz de la trompeta, ni tendremos hambre de pan y allí nos quedaremos,

Gade chapit la Kopi




Jeremías 42:14
15 Referans Kwoze  

Los israelitas les dec an: '¡Ojalá hubiéramos muerto a manos de Yahveh en tierra de Egipto, cuando nos sentábamos en torno a las ollas de carne y com amos pan en abundancia! ¡Nos habéis tra do a este desierto para matar de hambre a toda esta muchedumbre!'.


Pero el pueblo ten a una sed ardiente y murmuró contra Moisés, diciendo: '¿Por qué nos hiciste subir de Egipto para matarnos de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados?'.


y dijisteis: 'No será as, a caballo huiremos'. Está bien: huiréis. 'En corcel montaremos'. En corcel montarán los que os persiguen.


Bajan a Egipto, sin consultar mi oráculo, para refugiarse en la protección del Faraón, para cobijarse a la sombra de Egipto.


¡Ay de los que bajan a Egipto por ayuda y buscan apoyo en su caballer a! Conf an en los carros, que son muchos; en los jinetes, que son muy numerosos, y no miran al Santo de Israel, a Yahveh no consultan.


¡Mis entra as! ¡Mis entra as! ¡Me retuerzo de dolor! ¡Entretelas de mi corazón! Mi corazón me palpita, no puedo callarme, pues sonido de trompeta oye mi alma, alarma de guerra.


¿Hasta cuándo tendré que ver banderas y o r el son de la trompeta?


y se pusieron en camino. Hicieron alto en el albergue de Quinhán, junto a Belén, para proseguir la marcha y entrar en Egipto,


y se fueron al pa s de Egipto, pues no escucharon la voz de Yahveh. Y llegaron hasta Tafnis.


¿Por qué Yahveh nos quiere llevar a esa tierra, para que caigamos a espada, y que nuestras mujeres y nuestros peque os formen parte del bot n? ¿No ser a mejor para nosotros volver a Egipto?'.


Y se dec an unos a otros: '¡Elijamos un jefe y volvamos a Egipto!'.


¿Es poco habernos sacado de un pa s que manaba leche y miel para hacernos morir en el desierto, que todav a quieres erigirte sobre nosotros en jefe?


Pero no ha de tener muchos caballos, ni hará volver al pueblo a Egipto para aumentar su caballer a, porque Yahveh os ha dicho: 'No volveréis jamás por ese camino'.


Yahveh no querrá perdonarle, sino que se encenderá contra él la cólera y el celo de Yahveh; descargará sobre él todas las maldiciones escritas en este libro y Yahveh borrará su nombre de debajo del cielo.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite