Jeremías 32:10 - Biblia Castilian 2003

¹⁰ Escrib el documento, lo sellé, requer testigos y pesé el dinero en la balanza.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁰ Y escribí la carta y la sellé, y la hice certificar con testigos, y pesé el dinero en balanza.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁰ Firmé y sellé la escritura de compra delante de testigos, pesé la plata y le pagué.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁰ Después hice la escritura de compra y la sellé, busqué unos testigos y pesé la plata en una balanza.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁰ Y escribí el contrato, lo sellé, lo hice certificar con testigos, y le pesé el dinero en balanza.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁰ Escribí el documento, lo sellé, requerí testigos y pesé el dinero en la balanza.

Jeremías 32:10 Referans Kwoze

Génesis 23:16

Abrahán llegó a un acuerdo con Efrón. Pesó Abrahán para Efrón, en presencia de los hijos de Het, el dinero convenido: cuatrocientos siclos de plata de buena ley entre comerciantes.

Génesis 23:20

El campo y la cueva que hay en él fueron traspasados por los hijos de Het a Abrahán en propiedad sepulcral.

Job 14:17

Sellada quedar a en un saco mi falta, cancelar as mi culpa.

Cantares 8:6

Ponme de sello sobre tu corazón, como sello en tu brazo, pues fuerte es el amor como la muerte, y fiera la pasión como el seol. Sus ardores son rayos de una hoguera, una llama divina.

Isaías 30:8

Ahora ven, escr belo ante ellos en una tablilla, grábalo en bronce, para que sirva hasta el d a postrero de testimonio perpetuo.

Isaías 44:5

Éste dirá: 'Soy de Yahveh', ése se llamará con el nombre de Jacob, aquél escribirá en su mano: 'De Yahveh', y se apellidará 'Israel'.

Jeremías 32:12

y entregué el documento de compra a Baruc hijo de Ner as, hijo de Majs as, a la vista de Janamel, hijo de mi t o, a la vista de los testigos que hab an suscrito el documento de compra y a la vista de todos los jud os que estaban en el patio de la guardia,

Jeremías 32:25

Y sin embargo, tú, Se or Yahveh, me has dicho: 'Cómprate el campo con dinero y requiere testigos', cuando la ciudad va a ser entregada en mano de los caldeos'.

Jeremías 32:44

Se comprarán campos con dinero, se escribirán contratos y se sellarán y se requerirán testigos en el territorio de Benjam n y en los alrededores de Jerusalén, en las ciudades de Judá, en las ciudades de la monta a, en las ciudades de la llanura y en las ciudades del Negueb, pues cambiaré su suerte - oráculo de Yahveh -.

Daniel 8:26

La visión de las tardes y de las ma anas que ha sido expuesta, es verdadera. Pero tú guarda en secreto la visión, pues es para d as lejanos.'

Mateo 27:66

Ellos fueron y, después de sellar la piedra, pusieron el sepulcro bajo la custodia de la guardia.

Juan 3:33

El que acepta su testimonio, certifica que Dios es veraz.

Juan 6:27

No trabajéis por conseguir el alimento perecedero, sino el que permanece para vida eterna, el que os dará el Hijo del hombre, porque éste es el que el Padre, Dios, ha marcado con su sello'.

2 Corintios 1:22

nos marcó con su sello y puso en nuestros corazones la fianza del Esp ritu.

Efesios 1:13

En él también vosotros, después de haber o do la palabra de la verdad, el Evangelio de vuestra salvación; en él también, después de haber cre do, habéis sido sellados con el Esp ritu Santo de la promesa,

Efesios 4:30

Y no disgustéis al Esp ritu Santo de Dios, en el cual fuisteis sellados para el d a de la redención.

Deuteronomio 32:34

¿Acaso esto no está guardado en mis adentros, sellado entre mis tesoros?

Josué 18:9

Partieron, pues, los hombres, recorrieron el territorio y lo describieron en un libro por ciudades, dividiéndolo en siete partes; luego se presentaron a Josué en el campamento de Siló.

Apocalipsis 7:2

Vi a otro ángel que sub a de la parte del oriente y ten a el sello de Dios vivo. Y gritó con gran voz a los cuatro ángeles a quienes fue dado poder para da ar a la tierra y al mar,

Apocalipsis 9:4

Se les ordenó que no da asen la hierba de la tierra, ni nada verde ni árbol alguno, sino sólo a los hombres que no tienen el sello de Dios sobre sus frentes.

Rut 4:1

Booz subió a la puerta de la ciudad y se sentó all, precisamente cuando pasaba el que ten a derecho de rescate, del que hab a hablado Booz, y le dijo: 'Oye, fulano, acércate y siéntate aqu '. Se acercó y se sentó.