Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt
- Piblisite -





Jeremías 22:5 - Biblia Castilian 2003

5 Pero si no escucháis estas palabras, juro por m mismo - oráculo de Yahveh - que esta casa vendrá a ser una ruina.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

5 Mas si no oyereis estas palabras, por mí mismo he jurado, dice Jehová, que esta casa será desierta.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

5 Sin embargo, si rehúsan prestar atención a esta advertencia, les juro por mi propio nombre, dice el Señor, que este palacio se convertirá en un montón de escombros’”».

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

5 Pero si no escuchan estas palabras, les juro por mí mismo, Yavé es quien habla, este palacio será destruido.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

5 Pero si no escucháis estas palabras, por mí mismo he jurado, dice YHVH, que esta casa quedará desolada.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 Pero si no escucháis estas palabras, juro por mí mismo -oráculo de Yahveh- que esta casa vendrá a ser una ruina.

Gade chapit la Kopi




Jeremías 22:5
22 Referans Kwoze  

y le dijo: 'Juro por m mismo - oráculo de Yahveh - que por haber hecho tú esto, por no haberme negado tu hijo, tu único hijo,


Pero si vosotros os apartáis de m, no guardáis los preceptos y mandatos que os di, os vais a servir a dioses extra os y os postráis ante ellos,


Y respecto de este templo tan excelso, todo el que pase junto a él quedará estupefacto y se preguntará: '¿Por qué Yahveh ha tratado as a este pa s y a este templo?'.


Y responderán: 'Porque abandonaron a Yahveh, Dios de sus padres, que los sacó de la tierra de Egipto, y se apegaron a otros dioses, se postraron ante ellos y los sirvieron. Por eso vino sobre ellos toda esta desventura''.


Entonces en mi enojo les juré que no habr an de entrar en mi reposo.


si rehusáis y os rebeláis, por la espada seréis devorados. - Ha hablado la boca de Yahveh -.


He abandonado mi casa, he rechazado mi heredad, he entregado el amor de mi alma en mano de sus enemigos.


Pero si no me escucháis, si no santificáis el d a del sábado dejando de transportar cargas y de pasarlas por las puertas de Jerusalén el d a del sábado, entonces en sus puertas encenderé fuego que devorará los palacios de Jerusalén y no se apagará'.


Diles, pues: 'As dice Yahveh: si no me escucháis, obrando según la ley que he puesto delante de vosotros,


Los caldeos prendieron fuego al palacio real y a las casas de la población y derribaron las murallas de Jerusalén.


Pero escuchad la palabra de Yahveh, jud os todos que habitáis en el pa s de Egipto: mirad: yo juro por mi gran nombre - dice Yahveh - que en todo el pa s de Egipto no será pronunciado más mi nombre por boca de hombre alguno de Judá, diciendo: '¡Por vida del Se or Yahveh!'.


El Se or Yahveh lo jura por s mismo - oráculo de Yahveh, Dios Sebaot -: 'Aborrezco el orgullo de Jacob, detesto sus palacios; entregaré la ciudad y cuanto hay en ella'.


Justamente por vuestra culpa, Sión será arada como un campo, Jerusalén reducida a un montón de ruinas y el monte del templo a un cerro de maleza.


Mirad que vuestra casa se os quedará desierta.


¿Y a quiénes juró que no entrar an en su descanso, sino a los rebeldes?


Efectivamente, cuando Dios hizo la promesa a Abrahán, no teniendo otro mayor por quien jurar, juró por s mismo,


En este sentido, queriendo Dios demostrar hasta la saciedad a los herederos de la promesa que su decisión es irrevocable, interpuso como garant a un juramento,


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite