Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt
- Piblisite -





Isaías 9:4 - Biblia Castilian 2003

4 Porque toda bota que pisa con estrépito y el manto empapado de sangre serán combustible, pasto del fuego.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

4 Porque tú quebraste su pesado yugo, y la vara de su hombro, y el cetro de su opresor, como en el día de Madián.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 Pues tú quebrantarás el yugo de su esclavitud y levantarás la pesada carga de sus hombros. Romperás la vara del opresor, tal como lo hiciste cuando destruiste al ejército de Madián.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Los zapatos que hacían retumbar la tierra y los mantos manchados de sangre van a ser quemados: el fuego los devorará.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

4 Porque el yugo de su carga y la vara de su hombro, Y el cetro de su opresor,° Los quebraste, como en el día de Madián.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Porque toda bota que pisa con estrépito y el manto empapado de sangre serán combustible, pasto del fuego.

Gade chapit la Kopi




Isaías 9:4
24 Referans Kwoze  

Vivirás de tu espada y a tu hermano servirás. Mas tan pronto como intentes ser libre, arrojarás su yugo de tu cuello'.


Jamás se posará el cetro del malvado sobre la suerte de los justos, para que éstos no alarguen su mano a la maldad.


que él impuso a José en testimonio, cuando salió de tierra egipcia. A una lengua desconocida presto atención:


Por eso enviará el Se or, Yahveh Sebaot, delgadez a los bien alimentados; y bajo su opulencia, encenderá una quemazón, como quemazón de fuego, (18b) que consumirá cuerpo y alma y será como el languidecer de un enfermo.


¡Ay de Asiria, bastón de mi ira, vara en la mano de mi furor!


aplastaré a Asiria en mi pa s, en mis monta as la pisotearé, para que se aleje de ellos su yugo y la carga de su hombro sea quitada'.


Moren en ti los fugitivos de Moab; sé cobijo para ellos ante el devastador; que cesó la opresión, terminó la devastación, acabó el que pisoteaba el pa s.


Me enojé contra mi pueblo, profané mi heredad y los entregué en tus manos. Pero tú no te compadeciste de ellos. Sobre el anciano hiciste pesar tu yugo en demas a.


A tus opresores daré a comer su propia carne, y como de mosto se embriagarán con su sangre, para que sepan todos los mortales que yo, Yahveh, soy tu salvador y tu redentor, el fuerte de Jacob'.


Olvidabas a Yahveh, que te hizo, que extendió el cielo y fundó la tierra, y siempre temblabas todo el d a ante el furor del opresor cuando intentaba perderte. Pero ¿dónde está el furor del opresor?


Sacúdete el polvo, levántate, siéntate, Jerusalén; desata las correas de tu cuello, cautiva, hija de Sión;


Estarás cimentada en la justicia, alejada de la opresión, que no temerás, y del terror, que no se te acercará.


Porque nos ha nacido un ni o, se nos ha dado un hijo, que lleva al hombro el principado y es su nombre: Consejero Portentoso, Héroe Divino, Padre Sempiterno, Pr ncipe de paz.


Sucederá en aquel d a - oráculo de Yahveh Sebaot - que romperé el yugo de su cuello y quebraré sus coyundas. No lo esclavizarán ya extranjeros;


Dadle el pésame, vecinos suyos todos, y todos los que conocéis su nombre decid: '¡Ay cómo se ha roto el bastón del poder, el cetro majestuoso!'.


Yo soy Yahveh, vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto para que no fueseis esclavos suyos. Romp las coyundas de vuestro yugo, y os he hecho andar con la cabeza erguida.'


Ahora voy a quebrar el yugo que te oprime, voy a romper tus cadenas'.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite